En un encuentro que quedará grabado en la memoria de los aficionados al tenis, Novak Djokovic ha conquistado su título número 100 en el circuito profesional. El escenario de esta hazaña fue el ATP 250 de Ginebra, donde el tenista serbio se impuso en una emocionante final al polaco Hubert Hurkacz.
El partido, disputado en Suiza, fue un verdadero duelo de titanes. Hurkacz, con un juego sólido y potente, logró llevarse el primer set, sorprendiendo a Djokovic con su agresividad y precisión. Sin embargo, la resiliencia y la mentalidad de acero del serbio salieron a relucir en los siguientes sets.
Djokovic ajustó su estrategia, afinando su servicio y desplegando un revés implacable que desconcertó a Hurkacz. El segundo set se resolvió en un tie-break, donde Djokovic demostró su superioridad, igualando el marcador y llevando la definición al tercer set.
El set decisivo fue un auténtico pulso de nervios. Hurkacz logró un quiebre temprano, pero Djokovic, fiel a su estilo, no se rindió. Recuperó el quiebre y, nuevamente, el tie-break fue el escenario para definir al campeón. En este momento crucial, la experiencia y la determinación de Djokovic marcaron la diferencia, asegurando la victoria y el título número 100 de su carrera.
Este triunfo adquiere un significado especial, ya que llega en un momento de cambios y desafíos para Djokovic, incluyendo una reciente modificación en su equipo de entrenamiento. Además, precede al inicio de Roland Garros, un torneo de gran importancia para el serbio, donde buscará sumar otro título a su impresionante palmarés.
Con esta victoria, Novak Djokovic se une a un selecto grupo de tenistas que han alcanzado la centena de títulos, un logro que lo consolida como uno de los más grandes de la historia. Solo Jimmy Connors y Roger Federer superan esta marca, con 109 y 103 títulos respectivamente. El legado de Djokovic continúa creciendo, y su nombre ya está escrito con letras doradas en la historia del tenis.