El actor Benjamín Vicuña ha manifestado públicamente su preocupación por el nivel de exposición mediática que están experimentando sus hijos Amancio y Magnolia, fruto de su relación con la actriz Eugenia “La China” Suárez. La inquietud surge a raíz de los viajes de los menores junto a su madre y la pareja de ésta, el futbolista Mauro Icardi.
En una reciente entrevista, Vicuña declaró: “Me da tanta vergüenza que son cosas domésticas de permisos, viajes, vida familiar… En ese sentido sí se conversa y siempre se preserva a los chicos, que es lo más importante… Hay cosas que sí que me parece, están de más, pero la verdad es que es difícil”. El actor hizo hincapié en la importancia de proteger la privacidad de los niños y sugirió que ciertos aspectos de su vida familiar se están haciendo demasiado públicos. Además, descartó la posibilidad de que sus hijos se muden a Turquía con su madre.
Por su parte, Carolina “Pampita” Ardohain, expareja de Vicuña, también fue consultada sobre el tema durante un evento. Ante los rumores de una supuesta tensión entre Vicuña y Suárez, Pampita respondió con cautela: “Yo trato de no meterme. Además es un tema en el que no quiero participar principalmente porque tenemos un lazo todos como familia y prefiero mantenerme al margen”.
Pampita, quien en el pasado tuvo conflictos públicos con Suárez, enfatizó su decisión de mantener una postura neutral y respetuosa, especialmente considerando que sus hijos comparten lazos familiares con los hijos de Suárez y Vicuña. “Me preguntan todos los días y me guardo mi opinión siempre”, añadió la modelo, reafirmando su compromiso de no alimentar la controversia.
La relación entre Pampita y Suárez ha evolucionado con el tiempo, pasando de la confrontación al respeto mutuo, en gran medida por el bienestar de los niños involucrados. La postura de Pampita refleja un esfuerzo consciente por mantener la armonía dentro de la familia extendida.