Catalina de Erauso: Una Vida de Furia, Guerra y Búsqueda Incesante, Explorada por Florencia Canale

Florencia Canale se sumerge en un nuevo y fascinante capítulo de la historia con su novela La cruzada. Catalina de Erauso: la guerra en el cuerpo, su furia en la piel. Publicada por Planeta en 2025, la obra representa un cambio significativo para la autora, quien tradicionalmente se ha centrado en el siglo XIX y el período independentista americano. En esta ocasión, Canale se adentra en la “Historia grande de España”, explorando la vida de una figura enigmática y rebelde: Catalina de Erauso.

¿Quién fue Catalina de Erauso?

Catalina de Erauso, nacida en el seno de una familia acomodada de San Sebastián, fue internada en un convento de dominicas a la temprana edad de cuatro años. Desde el principio, su espíritu rebelde e intransigente se manifestó con fuerza. A los quince años, escapó del convento y abrazó una vida de aventura y desafío. Decidida a vivir como un hombre, adoptó ropas masculinas y se aventuró en un mundo lleno de peligros y oportunidades. Su vida, marcada por la furia y la guerra, la llevó a cruzar el Atlántico, a luchar por su rey y por sí misma, y a enfrentarse a la muerte en numerosas ocasiones.

Según la contratapa del libro, Catalina fue una “prófuga y encendida” que buscó la paz sin encontrarla, siendo arrastrada por sus tormentas internas a dondequiera que fuera. Sin embargo, la historia de Catalina de Erauso es mucho más que una simple búsqueda de paz; es una exploración profunda de la identidad, la libertad y el destino.

La Incertidumbre como Motor de la Búsqueda

Florencia Canale describe a Catalina como “pura incertidumbre”, una característica que, según la autora, define a la condición humana. Catalina se lanza al mundo sin saber exactamente qué busca, impulsada por un anhelo que el claustro no puede satisfacer. Esta búsqueda constante es un tema central en la novela, reflejando la lucha interna de Catalina por encontrar su lugar en un mundo que no la comprende.

Para Canale, el viaje, la búsqueda y el transcurso son más importantes que el destino final. Esta idea resuena en la sociedad actual, donde la ansiedad a menudo nos impide disfrutar del presente. Catalina, como fugitiva, está constantemente en movimiento, escapando de un destino predeterminado que la confinaba al monasterio. Al vestirse como hombre, se oculta tras una máscara, desafiando las expectativas sociales y persiguiendo su propia verdad.

El Descubrimiento de un Personaje Fascinante

Florencia Canale descubrió a Catalina de Erauso mientras investigaba a Bernardo de Monteagudo para uno de sus libros anteriores. El personaje la cautivó de inmediato, y la decisión de escribir sobre su vida fue instantánea. Canale describe a Catalina como un personaje “fascinante, inquietante, perturbador”, que la atrajo por su valentía al vestirse de hombre para escapar del convento.

La autora critica las interpretaciones simplistas que reducen la vida de Catalina a una mera cuestión de identidad de género. Para Canale, Catalina es mucho más que eso; es una figura compleja y multifacética que desafía las convenciones sociales y se enfrenta a un mundo hostil con determinación y coraje.

Catalina de Erauso: Escritora y Celebridad

Además de su vida extraordinaria, Catalina de Erauso también construyó su propia figura como escritora, algo impensable para la época. Escribió sus memorias, anticipándose a figuras como Sor Juana Inés de la Cruz. Su autobiografía, aunque breve, ofrece una visión fascinante de su vida y sus motivaciones.

Catalina se convirtió en una celebridad en vida, admirada y envidiada por igual. Sin embargo, la fama no la satisfizo, y decidió retirarse a América, buscando la soledad y la expiación en el desierto mexicano. Su vida, marcada por la guerra, la aventura y la búsqueda constante, culminó en un retiro espiritual donde buscó la paz interior.

El Destierro como Final

La historia de Catalina de Erauso es una historia de libertad, rebeldía y búsqueda incesante. Una vida que, en última instancia, pagó con el destierro. Al final, Catalina se encontró libre, pero sin saber a dónde ir, habiendo desafiado las normas de su tiempo y forjado su propio camino en un mundo que no la comprendía. La novela de Florencia Canale nos invita a reflexionar sobre la vida de esta figura fascinante y a explorar las profundidades de la condición humana.