El mundo del fútbol se vio sorprendido por una revelación inesperada: Paul Pogba, el talentoso mediocampista francés y campeón del mundo, confesó su asombro ante la fervorosa hinchada de Boca Juniors. Este encuentro fortuito se produjo durante un partido amistoso entre Boca y el Benfica, celebrado en la vibrante ciudad de Miami, como antesala al Mundial de Clubes 2025.
La presencia de Pogba en el estadio no pasó desapercibida. Sin embargo, lo que realmente capturó la atención del astro francés fue la atmósfera creada por los hinchas xeneizes. El fervor, la pasión y la energía desbordante que emanaban de la tribuna dejaron una huella imborrable en el jugador.
En una conversación distendida con Sergio “Kun” Agüero, durante un programa especial de ESPN, Pogba no escatimó elogios hacia la hinchada boquense. “Lo de Boca es una locura”, afirmó con convicción. El mediocampista, que ha experimentado la pasión del fútbol en lugares como Marsella y Nápoles, aseguró que “lo que vi con Boca nunca lo viví en mi vida”. Estas palabras resonaron con fuerza entre los aficionados xeneizes, quienes las interpretaron como un reconocimiento a la inigualable pasión que los caracteriza.
Pero la experiencia de Pogba no se limitó a presenciar el partido desde la tribuna. El francés también tuvo la oportunidad de visitar al plantel de Boca Juniors en la previa del encuentro. Allí, se reencontró con viejos conocidos como Sergio Romero, Edinson Cavani, Marcos Rojo y Ander Herrera, con quienes compartió momentos de camaradería y charlas amenas.
Además, Pogba mantuvo un encuentro especial con Juan Román Riquelme, el legendario ídolo de Boca Juniors y actual directivo del club. Riquelme, en un gesto de bienvenida, obsequió al francés una camiseta de Boca, la cual Pogba recibió con una sonrisa radiante.
La pregunta obligada surgió durante la conversación con el Kun Agüero: ¿Veremos algún día a Pogba vistiendo la camiseta azul y oro? La respuesta del francés, aunque en tono relajado, dejó abierta una puerta a la ilusión: “En la vida nunca se sabe”, respondió con una sonrisa enigmática. Su conexión con el entorno xeneize fue evidente, y su respeto por el club quedó plasmado en cada una de sus declaraciones.
Esta visita a Miami se produjo en un momento crucial para la carrera de Pogba, quien se preparaba para regresar al fútbol profesional tras cumplir una sanción de 18 meses por doping. Tras este período de inactividad, el mediocampista firmó un preacuerdo con el AS Mónaco, donde jugará hasta junio de 2027. El club del Principado lo incorporará como agente libre, con la mira puesta en una temporada en la que también competirán en la Champions League.
Cabe recordar que Pogba dio positivo en testosterona tras un control antidopaje realizado en agosto de 2023, cuando defendía los colores de la Juventus. Su última aparición oficial había sido el 3 de septiembre ante el Empoli. Tras apelar ante el TAS, su castigo fue reducido, lo que le permitió volver a competir desde marzo.
Ahora, Pogba se prepara para iniciar una nueva etapa en Francia, pero con un recuerdo imborrable de lo vivido con Boca Juniors en Miami. La pasión de la hinchada xeneize dejó una marca profunda en el campeón del mundo, quien no dudó en expresar su admiración por el club y su gente. Un encuentro que, sin duda, quedará grabado en la memoria de todos los que lo presenciaron.