Las calles de Mar del Plata fueron escenario de una persecución policial que culminó con la detención de cuatro individuos presuntamente involucrados en el robo de un vehículo a un oficial de policía. El incidente, ocurrido en la intersección de Mario Bravo y Reforma Universitaria, desató una rápida respuesta de las fuerzas del orden, que lograron interceptar a los sospechosos tras una intensa búsqueda.
Según fuentes policiales, la banda delictiva estaba integrada por dos jóvenes de 18 y 20 años, acompañados por dos adolescentes de tan solo 16 años. La presunta participación de menores en este tipo de delitos genera una creciente preocupación en la comunidad y pone de manifiesto la necesidad de abordar las causas subyacentes que llevan a los jóvenes a involucrarse en actividades ilícitas.
El personal de la comisaría decimosexta fue clave en la operación. Al avistar el Peugeot 208 reportado como robado, los agentes iniciaron una persecución que se extendió hasta la calle Eduardo Peralta Ramos al 2800. Allí, lograron interceptar el vehículo y aprehender a los cuatro ocupantes, poniendo fin a su intento de fuga.
Durante el operativo, las autoridades recuperaron documentación perteneciente a la víctima, así como su teléfono celular. Además, se incautaron los teléfonos móviles de los imputados, que podrían contener información valiosa para la investigación en curso.
El fiscal del Fuero de Responsabilidad Penal Juvenil, Carlos Russo, tomó cartas en el asunto y ordenó la notificación de una causa por robo agravado. Los cargos incluyen la comisión del delito en lugar poblado y en banda, así como el empleo de arma de fuego, la cual no fue recuperada en el lugar de la detención. Adicionalmente, se imputaron cargos por lesiones leves.
Ante la gravedad de los hechos, se dispuso el traslado de los dos menores de edad al Centro Especializado de Aprehensión (CEA) de Batán, un centro de detención juvenil. Por su parte, los dos mayores de edad fueron remitidos a la Unidad Penal N° 44 de Batán, donde permanecerán a disposición de la justicia.
Este incidente pone de relieve la creciente ola de inseguridad que afecta a Mar del Plata, con un aumento significativo en el robo de vehículos en el último año. Las autoridades locales se encuentran trabajando para fortalecer las medidas de prevención y control del delito, con el objetivo de garantizar la seguridad y el bienestar de los ciudadanos.
La detención de esta banda armada representa un golpe importante para la delincuencia en la zona, pero también subraya la necesidad de implementar políticas públicas integrales que aborden las causas profundas de la criminalidad, especialmente entre los jóvenes. La prevención, la educación y la inclusión social son herramientas fundamentales para construir una sociedad más segura y justa para todos.