El esperado retorno de Ángel Di María al fútbol argentino no defraudó en cuanto a emociones, aunque el resultado final dejó un sabor agridulce para los aficionados de Rosario Central. En un partido inaugural del Torneo Apertura que lo tuvo todo, el ‘Fideo’ fue protagonista desde el inicio, pero el encuentro terminó con un empate 1-1 frente a Godoy Cruz en un ‘Gigante de Arroyito’ que vibró y sufrió en igual medida.
Desde el pitido inicial, la presencia de Di María se hizo sentir. El balón buscaba constantemente al número 11, quien intentaba desequilibrar con su habilidad en el uno contra uno. La defensa mendocina, bien organizada, no dudaba en cortar el juego del argentino cuando era necesario. El primer tiempo transcurrió con intensidad, algunas jugadas de peligro en ambas áreas, pero sin que el marcador se moviera.
La segunda mitad mantuvo el equilibrio en el juego, con Rosario Central buscando imponer su localía. Sin embargo, el momento clave del partido llegó con una decisión arbitral polémica. El árbitro Pablo Dóvalo señaló una falta dentro del área que muchos consideraron inexistente, otorgando un penal a Rosario Central. Ángel Di María, con la calidad que lo caracteriza, no desaprovechó la oportunidad y convirtió el penal con una ejecución impecable, desatando la euforia en las gradas.
La controversia del penal encendió los ánimos en el equipo de Godoy Cruz. La frustración llevó a Barrea a protestar airadamente, lo que le valió la tarjeta roja y dejó a su equipo con diez hombres. Sin embargo, esta adversidad pareció darles un impulso adicional.
La alegría de Rosario Central se vio empañada cuando, a pocos minutos del final, Di María tuvo que retirarse del campo en camilla tras una dura entrada en la mitad de la cancha. La preocupación se apoderó de los hinchas, mientras Godoy Cruz, con un hombre menos, buscaba desesperadamente el empate.
El drama llegó en el quinto minuto de descuento. Vicente Poggi, con una gran anticipación en el área, conectó un cabezazo que se coló en la portería, sellando el empate 1-1. Un gol agónico que silenció el ‘Gigante de Arroyito’ y premió la perseverancia de Godoy Cruz, que a pesar de jugar con diez hombres, nunca se rindió.
En resumen, el regreso de Ángel Di María a Rosario Central fue un torbellino de emociones. Un penal polémico transformado en gol, una lesión que obligó a su salida prematura y un empate en el último suspiro resumen un partido que quedará grabado en la memoria de los aficionados. Si bien el resultado no fue el esperado, la presencia de Di María ilusiona a los hinchas de Rosario Central, que esperan que su talento y experiencia sean clave en el desarrollo del torneo.
El partido dejó varias lecturas. Rosario Central mostró destellos de buen fútbol, pero deberá mejorar su solidez defensiva y mantener la concentración hasta el final. Godoy Cruz, por su parte, demostró carácter y capacidad de reacción, rescatando un valioso punto en condición de visitante. El Torneo Apertura 2025 promete ser apasionante, y el regreso de Di María le añade un condimento especial a la competición.