La madrugada del miércoles se tornó amarga para un taller de productos artesanales ubicado en la calle Constitución al 8900. Delincuentes irrumpieron en el local, llevándose consigo valiosas herramientas y dejando a sus propietarios con una sensación de impotencia y la ardua tarea de reconstruir lo perdido.
Noel, la emprendedora detrás de la marca Menta Poleo, relata con frustración el momento en que descubrió el robo. “La alarma sonó, pero no la escuché. Al despertar, las notificaciones me alertaron: habían entrado a robar”, explica. Los ladrones, con astucia y descaro, forzaron una ventana y dañaron parte del techo para acceder al interior del taller. Afortunadamente, más allá del robo, los daños materiales fueron mínimos.
El botín de los delincuentes incluyó dos amoladoras –una Bosch y otra Argentec– y dos taladros. Estas herramientas son absolutamente esenciales para la producción de bachas, revestimientos y otros productos elaborados con la técnica del terrazo, que distingue a Menta Poleo. “La policía ha registrado los números de serie de las máquinas y estamos alertando a nuestros contactos por si alguien las ofrece”, comenta Noel, con la esperanza de recuperar lo sustraído.
El robo no solo representa una pérdida económica, sino que también impacta directamente en la capacidad productiva del taller. “Nos complica enormemente seguir trabajando, ya que las herramientas robadas son fundamentales para nuestra producción diaria”, lamenta Noel. En un contexto económico ya desafiante, este incidente se siente como un retroceso significativo. “En un país con tantas dificultades, estas cosas dan mucha bronca, porque tiran por la borda todo lo que venimos construyendo con tanto esfuerzo”, añade.
La inseguridad se ha convertido en una preocupación constante para los residentes del barrio. “Llevamos dos años aquí y nunca nos había sucedido algo así. Es un barrio tranquilo, pero siento que en Mar del Plata ya no hay lugares seguros”, expresa Noel, reflejando un sentimiento compartido por muchos vecinos.
A pesar del golpe, el equipo de Menta Poleo se muestra resiliente y determinado a superar este obstáculo. “Estamos tratando de ver cómo salir adelante. Somos dos personas trabajando de forma fija y un chico que nos ayuda ocasionalmente. Todo lo hacemos con mucho esfuerzo y dedicación”, explica Noel.
Con el objetivo de recaudar fondos y reponer las herramientas robadas, Menta Poleo ha decidido lanzar un sorteo solidario. Entre los premios, se encuentran productos elaborados en el taller, como un espejo, una bacha y una mesita. Esta iniciativa busca no solo obtener recursos, sino también involucrar a la comunidad y generar un sentido de apoyo mutuo.
Este robo es un recordatorio de los desafíos que enfrentan los emprendedores locales, quienes a menudo luchan contra la adversidad para mantener viva su pasión y contribuir a la economía de la comunidad. La esperanza reside en la solidaridad de los vecinos y en la determinación de Menta Poleo de seguir creando belleza a pesar de las dificultades.