Escándalo en la Justicia: Juez Acusado de Acoso Sexual en Medio del Caso Maradona

Escándalo en la Justicia: Juez Acusado de Acoso Sexual en Medio del Caso Maradona

En un giro inesperado en medio del ya complejo proceso judicial relacionado con el caso Maradona, el presidente de la Cámara de Apelaciones y Garantías en lo Penal de San Isidro, Ernesto García Maañón, se encuentra ahora en el centro de una tormenta legal. El magistrado, de 75 años, enfrenta graves acusaciones de acoso sexual y laboral, presentadas por su secretaria, G.S., justo después de haber supervisado el sorteo para designar un nuevo tribunal en el caso Maradona, tras el controvertido incidente del Makintach-gate.

La denuncia, formalizada dos semanas después del mencionado sorteo, incluye la presentación de chats y audios que, según la denunciante, evidencian un patrón de acoso sexual y laboral por parte de García Maañón. G.S., actualmente bajo licencia psiquiátrica, ha solicitado un cambio de puesto dentro del Poder Judicial, buscando alejarse del ambiente que, según su testimonio, se tornó hostil e insostenible.

Ante la gravedad de las acusaciones, García Maañón presentó su renuncia el 31 de julio. Sin embargo, a la fecha, el gobernador Axel Kicillof aún no ha aceptado la dimisión, situación similar a la que se presentó en el caso de Julieta Makintach. Mientras tanto, el juez es objeto de una investigación interna por parte de la Subsecretaría de Control Disciplinario de la Suprema Corte de Justicia de la Provincia de Buenos Aires, además de la denuncia penal que avanza en la Justicia.

La ex secretaria ha reforzado su denuncia con la entrega de 145 audios, presentados por su abogado, Juan Saucedo, ante la Justicia. Estas pruebas, junto con las conversaciones de WhatsApp, buscan respaldar las acusaciones de acoso sexual y laboral, detallando un presunto cambio radical en el trato del juez hacia su secretaria, inmediatamente después de que ella rechazara mantener una relación personal con él.

Detalles de las Acusaciones

Según la denuncia, el 25 de febrero, García Maañón envió un mensaje a G.S. a través de WhatsApp, sugiriéndole: “Cuidá tu cuerpo y salud, que te eleva la autoestima. Consejo, look para los juramentos (y para que me envidien): pelo suelto y el traje negro escotado con mini que llevaste el martes pasado”. La denunciante afirma que, a pesar de intentar mantener la cordialidad en sus respuestas, jamás volvió a utilizar la vestimenta sugerida por el juez. Los mensajes, según su testimonio, se volvieron constantes y perturbadores. Un ejemplo de ello es un mensaje recibido el 30 de marzo a la 1:12 de la madrugada: “¿Despierta? La noche es como el vino, te desinhibe. La noche es deseo, la pasión, la aventura”.

En otro intercambio, el 2 de abril, el juez se describió a sí mismo como un “cazador” y expresó su preferencia por la “presa difícil”, el “caballo que le costaba domarlo” y las “mujeres que no eran sumisas”. Estos mensajes, según la denunciante, crearon un ambiente de intimidación y acoso constante.

Incidentes en el Despacho

G.S. relató un incidente particularmente incómodo en el despacho del juez: “En una ocasión en la que nos encontrábamos a solas me ordenó: ‘Sentate en ese lugar’, señalando un cuerpo de un sillón… Me senté y el almohadón se hundió considerablemente y quedé como hundida, pequeñita. Entonces se sentó a mi lado y, mientras yo intentaba leer y explicarle temas (de trabajo) que había llevado escrito en hojas, su mirada y su cuerpo se giró considerablemente sobre mi cuerpo y su mirada se posó por encima de mi hombro… Fue la primera vez que me sentí intimidada por el doctor García Maañon… La luz tenue innecesaria, y la cercanía de su cuerpo me incomodó, sentí como que respiraba casi sobre mi cara… Luego, con voz suave, me preguntó ‘¿Te incomoda?’. Sí, le contesté con firmeza. Automáticamente, se levantó y se sentó en otro sillón”.

La denunciante también afirmó que, después de este incidente, el juez insistió en repetidas ocasiones en cenar juntos, llegando a decirle: “con que cenemos juntos me basta. Por mí podés venir desnuda jaja…”. En otra ocasión, relató que García Maañón la detuvo en su despacho, la tomó de la cintura e intentó bajar la mano hacia su cola, justificando su accionar con la excusa de que solo quería verla.

El Incidente con el Arma

Uno de los episodios más escalofriantes relatados por G.S. ocurrió el 19 de junio, cuando García Maañón la llamó a su despacho. “Me dijo que me sentara. Se levantó, saco del cajón su arma, le puso el cargador, le sacó el seguro o se lo puso… y en un movimiento rápido la pasó cerca de mi cara… Quedé como helada de haber visto el caño del arma pasar cerca de mi cara”, declaró la denunciante.

Tras la denuncia, la Procuración General bonaerense ha dado intervención a la Fiscalía General de San Isidro, a cargo de John Broyad. La causa está siendo investigada por el fiscal José Amallo. El abogado defensor de García Maañón es Adrián Murcho. Este escándalo sacude los cimientos del sistema judicial y plantea serias interrogantes sobre el poder y el acoso en el ámbito laboral.