Independiente Presenta su Descargo ante la CONMEBOL Tras Incidentes con Universidad de Chile: La Versión de Grindetti
En una tensa conferencia de prensa, Néstor Grindetti, presidente del Club Atlético Independiente, abordó la controversia generada tras la suspensión del partido de ida contra Universidad de Chile, correspondiente a los octavos de final de la Copa Sudamericana. El encuentro, que debía disputarse en el estadio Libertadores de América – Ricardo Enrique Bochini, se vio empañado por violentos incidentes que culminaron con su cancelación. Ante esta situación, Grindetti explicó detalladamente el descargo que el club elevó a la CONMEBOL, buscando eximir a la institución de cualquier responsabilidad en los hechos.
El principal objetivo del comunicado, según Grindetti, es defender la integridad de Independiente y desvincularlo de la cadena de eventos que llevaron a la suspensión del crucial partido. El presidente fue enfático al condenar la violencia, pero insistió en que Independiente no fue el instigador ni el culpable de los disturbios. “Independiente, de ninguna manera, fue responsable de la suspensión ni de la cancelación del encuentro,” declaró Grindetti. “La cancelación del partido es exclusivamente por las agresiones de la hinchada visitante.”
Grindetti añadió que se presentó un informe exhaustivo a la CONMEBOL para demostrar que el club fue víctima de “un grupo de delincuentes”. Destacó que el partido ya había sido catalogado como de alto riesgo por las autoridades de seguridad, dada la existencia de antecedentes problemáticos. En respuesta, Independiente implementó rigurosamente todos los protocolos exigidos por la CONMEBOL, reforzando tanto el operativo policial como la seguridad privada. A pesar de la participación de un gran número de efectivos y personal de control, en coordinación con el Ministerio de Seguridad, los incidentes se desencadenaron de forma repentina y con gran violencia por parte de los aficionados visitantes.
La versión oficial de Independiente sostiene que los hinchas de Universidad de Chile fueron los que iniciaron los disturbios, comenzando con la destrucción de las cámaras de seguridad del estadio y provocando enfrentamientos desde el momento en que llegaron a Avellaneda. “Desde el comienzo buscaron distorsionar la realidad. Todos saben que la agresión comenzó con su parcialidad”, afirmó Grindetti. Para respaldar esta acusación, el club difundió un video institucional que presenta la secuencia de los hechos desde la perspectiva de Independiente, mostrando imágenes de los hinchas chilenos agrediendo a la policía y causando daños en las instalaciones del estadio.
Ahora, la CONMEBOL se enfrenta a la compleja tarea de analizar los descargos presentados por ambas instituciones. El organismo deberá determinar si alguno de los equipos debe ser sancionado con la pérdida del partido, o si ambos serán eliminados de la competencia. Adicionalmente, el fallo podría incluir sanciones económicas o deportivas para Independiente.
La postura de la dirigencia de Independiente, expresada claramente por Grindetti, es que el club fue víctima de circunstancias fuera de su control, y que la responsabilidad de la suspensión recae directamente en Universidad de Chile y sus seguidores. El club buscará por todos los medios demostrar su inocencia y evitar cualquier sanción que pueda perjudicar su participación en la Copa Sudamericana.