Una serie de allanamientos realizados por la Justicia Federal en Mar del Plata, vinculados a la búsqueda de la obra de arte robada, el “Retrato de una dama”, que involucra a un financista nazi, derivaron en el secuestro de dos cuadros del siglo XIX. Las obras fueron encontradas en una vivienda ubicada en el barrio La Florida, y las autoridades se encuentran trabajando para determinar su origen y procedencia.
Los operativos, en total cuatro, se llevaron a cabo en diferentes puntos de la ciudad. Además del domicilio en La Florida, se allanaron un chalet en la intersección de las calles Cardiel y Patagones, una casa en Juan A. Peña, cerca de Derqui, y un departamento en la calle Santa Fe al 1700. En la vivienda del barrio La Florida, además de los dos cuadros, se incautó una colección de más de diez estampas de origen europeo.
Estos procedimientos forman parte de una investigación más amplia ordenada por el Juzgado de Garantías N.º 2, a cargo del juez Santiago Inchausti. En el marco de esta investigación, Patricia Kadgien, hija del financista nazi, y su esposo fueron detenidos y puestos bajo arresto domiciliario, tal como lo solicitó el fiscal Carlos Martínez, responsable de la oficina de Delitos Sencillos.
Según fuentes judiciales, la decisión de mantener a la pareja detenida se fundamenta en la presunta obstrucción de la investigación. Inicialmente, la detención se extenderá por un plazo de setenta y dos horas, hasta la celebración de la audiencia de formalización.
El chalet ubicado en Cardiel, cerca de Patagones, juega un papel crucial en la investigación. La puesta en venta de esta propiedad, y la posterior publicación de fotografías de su interior, fueron fundamentales para el avance del caso gracias a la investigación de un periodista neerlandés. Los periodistas Cyril Rosman, John van den Oetelaar y Peter Schouten, corresponsal de un diario neerlandés en Buenos Aires, descubrieron que una de las hermanas Kadgien había puesto su casa a la venta. Entre las imágenes publicadas del chalet, se podía observar el cuadro robado colgado en la pared del living.
Expertos en arte, como Annelies Kool y Perry Schrier, asesores de la Agencia de Patrimonio Cultural de los Países Bajos (Rijksdienst), examinaron las imágenes de la sala de estar publicadas por la inmobiliaria y confirmaron que lo que se veía era, aparentemente, el cuadro de Ghislandi. “No hay motivos para pensar que pueda ser una copia”, afirmaron los expertos, subrayando la importancia del hallazgo para la resolución del caso.
La investigación continúa en curso, con el objetivo de esclarecer el origen de las obras de arte incautadas y determinar la responsabilidad de los implicados en el presunto delito.