La reciente elección de concejales en General Pueyrredon ha marcado un hito significativo, con la electa concejal Gabriela Azcoitía celebrando su inminente incorporación al Concejo Deliberante a partir del 10 de diciembre. Su victoria no solo representa un logro personal, sino que también simboliza, según sus palabras, un triunfo colectivo para todos los habitantes de Mar del Plata.
En un ambiente de júbilo y esperanza, Azcoitía expresó su gratitud y visión para el futuro. “Lo que vivimos hoy es un triunfo de todos los marplatenses”, declaró, enfatizando que este logro trasciende individualidades y partidos políticos. Para ella, este resultado es el reflejo de la voluntad de un pueblo que anhela ser escuchado y que cree firmemente en la posibilidad de transformar la política a través del diálogo y la colaboración.
La periodista convertida en política destacó que su elección al Concejo Deliberante no es simplemente un ingreso, sino una clara señal de que Mar del Plata demanda un cambio profundo y genuino. “Hoy no solo logramos ingresar al Concejo Deliberante, sino que lo hacemos con una representación que demuestra que Mar del Plata está pidiendo un cambio en serio”, afirmó, subrayando la necesidad de una política que se centre en las necesidades y aspiraciones de la comunidad, dejando de lado intereses particulares.
Azcoitía visualiza un proyecto político arraigado en la realidad cotidiana de los marplatenses. “Este triunfo nos dice algo muy claro: vale la pena escuchar para transformar”, expresó. Su propuesta se basa en la construcción de un futuro forjado desde las calles, las escuelas, los comercios y cada rincón de la ciudad, donde los ciudadanos sean los verdaderos protagonistas del cambio.
La flamante concejal, acompañada por Ariel Bordaisco y el resto de su equipo, transmitió un mensaje de profundo agradecimiento y optimismo. “Gracias, gracias de corazón. Este es solo el principio”, manifestó, reafirmando su compromiso de trabajar incansablemente para construir el futuro que Mar del Plata merece. Su discurso resonó con la promesa de un nuevo comienzo, un futuro donde la voz de la ciudad se escuche fuerte y claro en el Concejo Deliberante.
La victoria de Azcoitía se percibe como un punto de inflexión, un momento en el que Mar del Plata alza su voz y decide tomar las riendas de su destino. Su llegada al Concejo Deliberante representa una oportunidad para impulsar políticas públicas que respondan a las verdaderas necesidades de la comunidad, promoviendo un desarrollo inclusivo y sostenible para todos los marplatenses.
El desafío que enfrenta Azcoitía es grande, pero su compromiso y la confianza depositada por los votantes son la base para construir un futuro mejor para Mar del Plata. La expectativa es alta, y la ciudad espera con ansias ver cómo se materializan sus promesas y se inicia una nueva etapa de progreso y bienestar para todos sus habitantes.