La justicia ha dictado sentencia en un caso que resonó profundamente en la ciudad de Mar del Plata. Emmanuel “El Tuerto” Hervort y Alán Cardoso, los dos individuos responsables del brutal asesinato del remisero Carlos Guzmán en agosto de 2022, han sido condenados a prisión perpetua. La decisión judicial, unánime, responde al delito de homicidio criminis causa, tal como lo había solicitado el fiscal Leandro Arévalo durante la etapa de alegatos finales.
El crimen, perpetrado en el barrio Bernardino Rivadavia, tuvo como móvil el robo del vehículo de Guzmán. Según la investigación y el veredicto de los jueces Gustavo Fissore, Federico Cecchi y Alexis Simaz, Hervort y Cardoso asesinaron al remisero con el objetivo de garantizar su impunidad tras el robo del Ford Focus que Guzmán utilizaba para trabajar. Los magistrados rechazaron la solicitud de nulidad del acta de secuestro del vehículo, un elemento clave en la investigación.
La investigación penal preparatoria, llevada a cabo por la Unidad Funcional de Instrucción N°7, reconstruyó meticulosamente los hechos. Se determinó que el 28 de agosto de 2022, Hervort y Cardoso, actuando en conjunto y con una clara distribución de roles, abordaron a Carlos Guzmán mientras este se encontraba a bordo de su vehículo, esperando a un pasajero en la zona de Tierra del Fuego al 2800. Los criminales portaban al menos un arma de fuego.
La fiscalía argumentó, y el tribunal avaló, que los asaltantes exigieron a Guzmán la entrega del vehículo. Ante la resistencia de la víctima, y con la intención inequívoca de concretar el robo, le dispararon a corta distancia, apuntando a una zona vital. El disparo causó la muerte instantánea del remisero, truncando su vida y dejando a una familia sumida en el dolor.
Tras el disparo fatal, Hervort tomó el control del vehículo y, junto a Cardoso, quien esperaba en una motocicleta, huyeron rápidamente del lugar del crimen. La investigación policial, sin embargo, no tardó en dar sus frutos. El vehículo robado fue localizado ese mismo día, oculto en una vivienda ubicada en la calle Magallanes al 10.400.
La captura de los responsables se produjo poco después, tras una serie de allanamientos en los que se secuestraron armas de fuego y dos motocicletas. “El Tuerto” Hervort fue aprehendido en uno de estos operativos. Cardoso, por su parte, optó por entregarse a las autoridades un día después, consciente de la evidencia que lo incriminaba.
La condena a prisión perpetua impuesta a Hervort y Cardoso representa un importante paso para la justicia y un mensaje claro a la sociedad. La gravedad del crimen, la premeditación y la alevosía con la que actuaron los asesinos justificaron la máxima pena contemplada por la ley argentina. Este veredicto busca brindar algo de consuelo a la familia de Carlos Guzmán y reafirmar el compromiso de las autoridades con la seguridad y la justicia en la comunidad de Mar del Plata.
Este caso, que conmocionó a la ciudad, pone de manifiesto la problemática de la inseguridad y la necesidad de redoblar los esfuerzos para prevenir este tipo de delitos. La colaboración entre la policía, la justicia y la comunidad es fundamental para garantizar la seguridad de todos los ciudadanos y evitar que tragedias como la de Carlos Guzmán se repitan.