La rutina matutina en los estudios de Crónica TV se vio abruptamente interrumpida por una escena de pánico y confusión. Mientras la periodista Barbi Corvalán presentaba las noticias del espectáculo, una inesperada irrupción transformó el set en un escenario de tensión palpable.
Un Asalto Inesperado
Las alarmantes placas rojas que caracterizan al canal no tardaron en anunciar la emergencia: “Entraron a Crónica TV con un cuchillo. Al grito de ‘me quieren matar’ ingresó al estudio”. Un hombre, visiblemente alterado y portando un arma blanca, había logrado superar la seguridad del canal, sembrando el caos a su paso.
El Atacante: Un Historial Delictivo
El intruso, identificado con un prontuario que incluye delitos relacionados con drogas, robo, tentativa de robo y hurto, además de una condena en suspenso, sumó un nuevo capítulo a su historial: la irrupción violenta en un medio de comunicación. Testigos relataron que, vociferando “soy el mejor y me quieren matar”, logró evadir los controles de seguridad e ingresar al estudio.
Pánico en el Estudio
Según declaraciones de la señal televisiva, el hombre increpó al personal de seguridad y avanzó directamente hacia el estudio. El pánico se apoderó de cada rincón del canal. La incertidumbre sobre cómo el individuo había logrado penetrar la seguridad y llegar tan lejos generó una atmósfera de temor e inseguridad. La amenaza era clara: un sujeto armado y fuera de sí había convertido el canal en una zona de peligro.
Un Grito de Desesperación
En medio del caos, el hombre expresó su desesperación: “Me siento muy mal, siento que mi familia está muy en peligro últimamente. Tengo cinco hijos. Hasta mi madre. Mi hermana es policía. Terminé viviendo en la calle por problemas de adicción”. Sus palabras revelaban una profunda angustia y un sentimiento de persecución.
Intervención Policial y Resolución
La Policía de la Ciudad se movilizó rápidamente al lugar. Ante la negativa del hombre a abandonar el canal, se solicitó la intervención del grupo especial de la División de Operaciones Especiales Metropolitanas (GEOF). Tras una negociación liderada por una especialista policial, el grupo GEOF irrumpió en el sector donde se encontraba el hombre, logrando reducirlo después de dos horas de tensión.
Consecuencias y Asistencia
Afortunadamente, el personal del canal resultó ileso. El atacante fue asistido por personal del SAME psiquiátrico y trasladado al hospital Argerich. La Unidad de Flagrancia Este inició actuaciones legales por violación de domicilio y daños, ya que el hombre había roto un vidrio al ingresar al canal.
Un Incidente Premeditado
Se reveló que el jueves y viernes anteriores al incidente, el hombre ya había visitado el canal. El jueves, incluso, se encontraba acompañado por otras dos personas. En ese momento, su presencia no despertó sospechas, ya que es común que personas intenten contactar a alguien en el canal o busquen información. Sin embargo, la presencia de acompañantes el jueves sugiere que podría haber estado estudiando la logística del lugar.
Reflexiones Posteriores
El incidente ha dejado una profunda huella en el personal del canal y en la comunidad. Las autoridades investigan las motivaciones del atacante y las fallas en la seguridad que permitieron su ingreso. El vidrio roto, las miradas de temor, los minutos de encierro y el miedo persisten como un recordatorio latente de la vulnerabilidad y la imprevisibilidad de la violencia.