La Escalera Imperial de Mar del Plata: Un Rescate Histórico
En el corazón de Mar del Plata, una ciudad con una rica historia aristocrática, se alza un monumento que evoca los tiempos dorados de la Belle Époque: la Escalera Imperial. Originalmente concebida como parte del majestuoso Paseo General Paz, diseñado por el renombrado paisajista Carlos Thays hace más de un siglo, esta escalera ha sido testigo de la evolución de la ciudad y, tras un meticuloso proceso de restauración, ha recuperado su esplendor original.
El Paseo General Paz, en su concepción original, era un espectáculo visual que se extendía desde la Plaza Colón hasta la costa. Lagos artificiales, fuentes ornamentales, estatuas importadas de Francia y bancos frente al mar creaban un ambiente de sofisticación y elegancia. La Escalera Imperial, ubicada entre las rocas de Las Toscas y el Torreón del Monje, era un componente esencial de este paisaje idílico.
Sin embargo, el paso del tiempo y la falta de conciencia sobre su valor histórico habían deteriorado significativamente la escalera. Pasamanos rotos, balaustres faltantes y escalones dañados eran solo algunos de los signos de abandono. A pesar de su estado, la Escalera Imperial seguía siendo el último vestigio del ambicioso proyecto de Carlos Thays en Mar del Plata.
Un Proyecto de Restauración Minucioso
Con el objetivo de devolverle su antigua gloria, un equipo de restauradores se embarcó en un proyecto ambicioso y detallado. La directora de Restauración de Monumentos Históricos, lideró la iniciativa, impulsada por una profunda investigación de la época aristocrática de Mar del Plata. Documentos originales, fotografías antiguas y planos originales sirvieron como guía para asegurar la autenticidad de la restauración.
Uno de los desafíos más importantes fue la reconstrucción de los elementos decorativos de la escalera. De los trescientos balaustres originales, solo quedaban once. Para replicarlos fielmente, se retiró uno de los balaustres restantes y se utilizaron moldes para crear copias idénticas. Este proceso artesanal, meticuloso y laborioso, requirió paciencia y dedicación.
Además de los balaustres, también se restauraron los pasamanos, los escalones y otros elementos arquitectónicos. Se instalaron nuevas farolas, siguiendo el diseño original, para iluminar la escalera durante la noche. Se recuperaron copones decorativos, incluyendo una pieza francesa traída por Thays en 1909 que corona la escalera.
Un Legado Recuperado
El resultado del proyecto de restauración es impresionante. La Escalera Imperial ha recuperado su belleza original, convirtiéndose en un símbolo del patrimonio histórico de Mar del Plata. Los visitantes y residentes ahora pueden disfrutar de un paseo seguro y agradable por la escalera, apreciando la arquitectura y la elegancia de la época dorada de la ciudad.
La restauración de la Escalera Imperial no solo es un logro arquitectónico, sino también un acto de preservación de la memoria colectiva. Al rescatar este monumento histórico, se honra el legado de Carlos Thays y se reafirma el compromiso de la ciudad con su pasado.
La Escalera Imperial es más que una simple escalera; es un testimonio de la historia, la cultura y la identidad de Mar del Plata. Su restauración es un motivo de orgullo para la ciudad y una invitación a explorar su rico patrimonio.