La ciudad de Rosario se encuentra consternada tras el trágico asesinato de Lucas Martín Cicarelli, un joven que perdió la vida al ser empujado por un barranco en la costanera central durante un violento robo. Su novia, Martina, de 20 años, relató con angustia los terribles momentos que vivieron juntos aquella fatídica noche, tras prestar declaración en el Centro de Justicia Penal.
Según el testimonio de Martina, ambos jóvenes acababan de terminar su jornada laboral y se encontraban sentados a la orilla del río, disfrutando de un momento de tranquilidad. Jamás imaginaron que su noche tomaría un rumbo tan devastador. “Pensé que iba a ser una noche normal como todas, pero perdí a la persona que amaba”, expresó Martina, visiblemente afectada.
La pareja fue abordada por dos hombres armados que, sin mediar palabra, los amenazaron con violencia. Uno de los asaltantes apuntó directamente a Martina, exigiéndole que permaneciera inmóvil, mientras que el otro se dirigió a Lucas, demandándole la entrega de sus pertenencias. En un intento desesperado por proteger a su novia, Lucas se enfrentó a los agresores.
El forcejeo culminó de la manera más trágica: los delincuentes empujaron a Lucas por el barranco, provocando su fatal caída al río. “Vi cómo empezaron a forcejear, retrocedí y una persona vino corriendo y se tiró sobre él”, narró Martina, reviviendo el horror de la escena. Tras la huida de los asaltantes, la joven, presa del pánico y la desesperación, salió a la calle en busca de ayuda.
La investigación policial condujo a la detención de dos sospechosos. Sin embargo, la situación judicial de uno de ellos ha generado una profunda indignación. Un médico forense dictaminó que uno de los detenidos, de 30 años, es inimputable debido a que no comprendería la criminalidad de sus actos. Esta decisión ha desatado la furia de Martina, quien clama por justicia.
“Sé que dos personas mataron a Lucas, lo tiraron. No puedo creer que uno sea inimputable, es muy injusto, no puede quedar así”, afirmó la joven, exigiendo que los responsables rindan cuentas por sus actos. La declaración de inimputabilidad será revisada por una nueva junta médica forense antes de que un juez tome una decisión definitiva sobre su situación.
El otro detenido, Andrés Rodrigo Frontera, de 38 años, fue formalmente imputado por el delito de homicidio en ocasión de robo y permanecerá bajo prisión preventiva. La fiscalía sostiene que ambos individuos participaron en el asalto ocurrido en la intersección de Moreno y el río Paraná, donde Lucas y Martina compartían un jugo momentos antes del fatal ataque.
El caso ha generado una gran conmoción en la sociedad rosarina, que exige justicia para Lucas y reclama mayor seguridad en la ciudad. La investigación continúa en curso, y se espera que los responsables sean llevados ante la justicia para que paguen por el terrible crimen que cometieron.
La comunidad se ha unido en el dolor y la solidaridad con la familia y los amigos de Lucas, exigiendo que este trágico suceso no quede impune y que se tomen medidas para evitar que hechos similares se repitan en el futuro.