El Estadio Presidente Perón, conocido como el “Cilindro” de Avellaneda, fue testigo de un encuentro cargado de tensión y esperanza, donde Racing Club se enfrentó a Flamengo en el partido de vuelta de las semifinales de la Copa Libertadores 2025. El marcador final, un empate sin goles, sentenció la eliminación de la “Academia”, tras la derrota 1-0 sufrida en el partido de ida en Brasil. A pesar del esfuerzo y la entrega, Racing no logró superar la solidez defensiva del equipo brasileño y la destacada actuación de su arquero, Agustín Rossi.
Desde el pitido inicial, Racing salió a buscar el gol que le permitiera igualar la serie. La primera ocasión clara llegó a los 11 minutos, cuando Facundo Mura, desde la banda derecha, envió un centro preciso a la cabeza de Tomás Conechny. El remate del delantero, potente y dirigido al poste derecho, fue magistralmente desviado al córner por Rossi, quien comenzaba a erigirse como la figura del encuentro. Flamengo respondió minutos después con una internada por izquierda que culminó con un remate de Guillermo Varela, bien contenido por el arquero de Racing, Facundo Cambeses.
El partido continuó con un ritmo intenso, con ambos equipos buscando el arco rival. Santiago Solari, aprovechando un descuido de la defensa brasileña, probó con un disparo alto que se marchó por encima del travesaño. Por su parte, Giorgian De Arrascaeta, en una jugada individual, exigió una buena intervención de Cambeses, quien se mostró seguro bajo los tres palos.
La segunda mitad comenzó con un golpe anímico para Flamengo, tras la expulsión de Gonzalo Plata por una agresión sobre Marcos Rojo. Sin embargo, Racing no supo aprovechar la superioridad numérica. Agustín Almendra intentó sorprender con un remate desde fuera del área, pero Rossi controló sin problemas. Con el correr de los minutos, la desesperación comenzó a apoderarse del equipo local. Adrián “Maravilla” Martínez, en un cabezazo desviado, y Adrián Balboa, con un remate que rozó el poste, tuvieron en sus pies la posibilidad de cambiar la historia.
En el tiempo de descuento, Luciano Vietto tuvo la última gran oportunidad para Racing. Un centro al área quedó suelto y el delantero conectó un potente volea que parecía tener destino de gol. Sin embargo, Rossi, con una reacción felina, desvió el remate y selló la clasificación de Flamengo a la final de la Copa Libertadores. El pitido final desató la desazón en el “Cilindro”, donde los hinchas de Racing vieron esfumarse el sueño de levantar el máximo trofeo continental. La solidez defensiva de Flamengo y la brillante actuación de su arquero fueron demasiado para un Racing que, a pesar de su esfuerzo, no pudo romper el cerrojo y se quedó a las puertas de la gloria.
El arbitraje del chileno Mazza también fue objeto de críticas por parte de los aficionados y la prensa deportiva, quienes consideraron que algunas de sus decisiones perjudicaron al equipo local. Sin embargo, más allá de las polémicas, la realidad es que Racing no logró concretar las oportunidades que tuvo y terminó pagando caro el gol en contra sufrido en el partido de ida.
Con la eliminación en la Copa Libertadores, Racing deberá enfocarse ahora en el torneo local y buscar revancha en futuras competiciones. El equipo tiene talento y potencial, pero deberá trabajar duro para superar este duro golpe y volver a ilusionar a su afición.