Ola de Robos de Medidores de Agua Afecta al Barrio Pinos de Anchorena

Ola de Robos de Medidores de Agua Afecta al Barrio Pinos de Anchorena

El barrio Pinos de Anchorena, un enclave tradicional de la ciudad, se ha visto nuevamente afectado por una serie de robos de medidores de agua, generando preocupación y malestar entre sus residentes. Los vecinos han denunciado la sustracción de estos dispositivos en varios domicilios durante la jornada del viernes, reviviendo el temor a una repetición de los incidentes que sufrieron el año anterior.

Los primeros reportes de los robos provinieron de la calle San Lorenzo, entre Italia y Misiones. Los residentes, al salir de sus hogares, se percataron de la pérdida de agua y, tras una inspección, confirmaron que los medidores habían sido manipulados y sustraídos. El modus operandi de los delincuentes implica la rotura de los medidores para extraer piezas que luego son revendidas en el mercado negro.

La situación se extendió rápidamente a otras zonas del barrio. Vecinos de la calle Misiones, entre Peña y Roca, también reportaron la sustracción de sus medidores. Ante la magnitud del problema, los residentes afectados presentaron de inmediato sus reclamos ante la empresa Obras Sanitarias, con la esperanza de una pronta solución y el restablecimiento del servicio.

Este incidente no es un hecho aislado. El año pasado, los vecinos de Pinos de Anchorena ya habían experimentado una situación similar, con robos de medidores que se sucedieron durante tres días consecutivos. Las zonas más afectadas en aquel entonces fueron la calle San Lorenzo entre Chaco y Pampa, y San Lorenzo al 4400, entre Misiones y Chaco. La repetición de estos hechos ha generado una profunda sensación de inseguridad e impotencia entre los residentes.

En el pasado, los vecinos expresaron su frustración ante la falta de medidas preventivas efectivas. Manifestaron una “sensación de impunidad total” por parte de los delincuentes y la convicción de que “sin prevención no hay solución posible”. La reiteración de los robos parece confirmar sus temores y pone de manifiesto la necesidad urgente de implementar estrategias de seguridad que protejan a los residentes y sus bienes.

La comunidad de Pinos de Anchorena se encuentra ahora en estado de alerta, instando a las autoridades a tomar medidas concretas para frenar esta ola de robos. Los vecinos exigen mayor presencia policial en la zona, la instalación de cámaras de seguridad y la implementación de programas de vigilancia vecinal. La seguridad del barrio y la tranquilidad de sus residentes dependen de una respuesta rápida y efectiva ante esta problemática.

Mientras tanto, los vecinos se organizan para protegerse mutuamente, compartiendo información y alertando sobre cualquier actividad sospechosa. La solidaridad y la colaboración se han convertido en herramientas clave para enfrentar la inseguridad y exigir a las autoridades la protección que merecen.