Sileoni Aborda Incidentes en la Escuela N°21: Un Análisis Detallado de la Situación Escolar Bonaerense
Alberto Sileoni, Director General de Cultura y Educación de la provincia de Buenos Aires, ha emitido declaraciones sobre los recientes incidentes de violencia ocurridos en la Escuela Primaria N°21 de Mar del Plata. Estos incidentes, que incluyeron destrozos y agresiones, surgieron a raíz de denuncias presentadas por madres de dos niñas pequeñas, de 6 y 7 años, quienes alegaron tocamientos inapropiados por parte de un alumno de 10 años.
En respuesta a estos hechos, Sileoni enfatizó la gravedad de la situación, pero también procuró contextualizarla dentro del panorama educativo provincial. Subrayó que, si bien los incidentes son preocupantes, no se puede hablar de una “pandemia de violencia” generalizada en las escuelas de la provincia de Buenos Aires.
“Considerando la vasta cantidad de aulas que tenemos en la provincia, aproximadamente 90.000 entre los niveles primario y secundario, los episodios violentos, aunque lamentables, son puntuales,” afirmó Sileoni en una entrevista. El funcionario reconoció la importancia de no minimizar estos hechos, pero también advirtió contra la generalización y la creación de una percepción distorsionada de la realidad escolar.
Sileoni expresó su solidaridad con la comunidad educativa de Mar del Plata, calificando la reacción que derivó en daños a la infraestructura escolar y agresiones al personal como “inadmisible”. Reconoció el comprensible dolor y la frustración que pueden sentir los padres y miembros de la comunidad, pero insistió en que la violencia no es la respuesta.
“No justifico en absoluto lo que sucedió. Estamos hablando de niños muy pequeños, y cualquier acto indebido debe ser abordado con diálogo, comprensión y, si es necesario, con las sanciones correspondientes. Pero bajo ninguna circunstancia se puede responder a la violencia con más violencia,” declaró Sileoni.
El Director General de Cultura y Educación admitió que situaciones similares se han presentado en otras localidades de la provincia de Buenos Aires, pero reiteró que no se trata de un fenómeno generalizado o extendido. Hizo hincapié en la importancia de mantener la calma y la racionalidad al abordar estos incidentes, evitando reacciones impulsivas que puedan exacerbar la situación.
“Hay personas que, en momentos de tensión, actúan impulsivamente, perdiendo la individualidad y la racionalidad. Esto no puede ocurrir en una escuela, ni en Mar del Plata ni en ningún otro lugar,” remarcó Sileoni. Subrayó la necesidad de preservar el ambiente escolar como un espacio de aprendizaje, respeto y convivencia pacífica.
Los incidentes en la Escuela N°21 culminaron con la intervención de la policía, quienes desalojaron el edificio después de que un grupo de padres ingresara al establecimiento, causando daños y agrediendo al personal. Se iniciaron investigaciones judiciales por los delitos de daños y lesiones. Sileoni reiteró que esta reacción no es justificable y que se deben seguir los canales adecuados para resolver los conflictos.
En resumen, la postura de Sileoni ante los incidentes en la Escuela N°21 refleja un intento de equilibrar la preocupación por los hechos específicos con una visión más amplia de la realidad escolar bonaerense. Reconoce la existencia de problemas y la necesidad de abordarlos, pero también advierte contra la generalización y el alarmismo, promoviendo el diálogo, la comprensión y la búsqueda de soluciones pacíficas.