Un Largo Conflicto Judicial Llega a su Fin: Demanda por Daños Desestimada
Un extenso proceso judicial, originado por una denuncia de abuso sexual contra una menor, presentada por una mujer contra su ex pareja, culminó la semana pasada con una resolución del Juzgado Civil y Comercial N° 5 de Mar del Plata. El juzgado desestimó una demanda por daños y perjuicios interpuesta por el hombre acusado.
Cronología de los Hechos
El caso se remonta al 2 de octubre de 2011, cuando A.L.B. presentó una denuncia en la Comisaría de la Mujer y la Familia, acusando a E.R., su ex pareja, de abuso sexual agravado en perjuicio de su hija menor. La denunciante formalizó la acción penal en contra del acusado. La causa fue investigada bajo la supervisión del Juzgado de Garantías N°1 y la Unidad Funcional de Instrucción N°4, donde la denunciante ratificó sus acusaciones un mes después.
A raíz de la denuncia, se solicitó una orden de restricción de acercamiento y una medida de protección contra la violencia familiar ante el Tribunal de Familia N° 1. Este último tribunal dictaminó la restricción de acercamiento de E.R. hacia su hija. Aunque la causa penal fue archivada, la mujer continuó solicitando reiteradamente restricciones de acercamiento ante los Tribunales de Familia. No fue sino hasta mayo de 2013 que se establecieron las primeras reuniones supervisadas con el objetivo de revincular al padre con su hija.
La Demanda por Daños y Perjuicios
E.L., el hombre acusado, presentó una demanda por daño moral y psicológico, argumentando que la falsa denuncia y su amplia difusión pública, así como la consiguiente restricción de contacto con su hija durante casi dos años, fueron la causa de su sufrimiento. Alegó que estos hechos le habían causado un daño significativo en su vida personal y profesional.
El Fallo del Juez
El Juez Guillermo Drees, al analizar el caso, determinó que, si bien el demandante describió una serie de eventos que supuestamente generaron los daños reclamados, el punto central del conflicto radicaba en la denuncia penal presentada por la mujer.
“Tras un análisis exhaustivo de las pruebas presentadas, no considero acreditado que la Sra. B. haya actuado con dolo o culpa, elementos esenciales para configurar la acusación calumniosa. Por lo tanto, anticipo un fallo desfavorable a los intereses del demandante”, afirmó el juez en su sentencia.
La Contrademanda y su Prescripción
En respuesta a la demanda, la mujer planteó la existencia de un daño continuado y solicitó una indemnización por daño psicológico. Sin embargo, esta contrademanda fue rechazada por prescripción, ya que el juez determinó que los daños alegados eran anteriores a 2016 y, por lo tanto, estaban sujetos al plazo de prescripción de dos años establecido en el Código Civil.
Actuación Razonable y Obligación Legal
El Juez Drees consideró que la madre actuó de manera razonable y en cumplimiento de la obligación legal establecida en la Ley 12.569 de Violencia Familiar, que exige denunciar posibles abusos o hechos que puedan afectar a un menor. El archivo de la causa penal, según el juez, no es suficiente para presumir falsedad o mala fe por parte de la denunciante.
Además, el juez determinó que no se pudo probar que la mujer hubiera divulgado la denuncia en ámbitos sociales o laborales, ya que los testimonios presentados por ambas partes resultaron contradictorios y se neutralizaron entre sí.
Conclusión
Con la prescripción de la contrademanda, se cierra un prolongado conflicto judicial que se extendió por más de una década, dejando atrás un rastro de acusaciones, restricciones y disputas legales.