La ciudad de Mar del Plata se encuentra consternada ante la misteriosa desaparición de Marisa Pereyra, de 49 años, y su hija Ángeles, de tan solo 4 años. La ausencia de ambas, ocurrida hace más de una semana, ha movilizado a familiares, vecinos y a la comunidad en general, quienes exigen respuestas claras y acciones concretas por parte de las autoridades.
La incertidumbre ha generado un profundo sentimiento de preocupación en el barrio Autódromo, donde residían Marisa y Ángeles. Los vecinos, unidos en la búsqueda de la verdad, han decidido alzar su voz para exigir una investigación exhaustiva y la intensificación de los esfuerzos para dar con el paradero de la madre y la hija.
En este contexto, se ha convocado a una marcha que tendrá lugar esta tarde frente a la Municipalidad de Mar del Plata, a partir de las 18:30. El objetivo principal de esta concentración es solicitar el apoyo de las autoridades locales y exigir que se refuercen los canales de búsqueda y se destinen los recursos necesarios para esclarecer este inquietante caso.
Camila, sobrina de Marisa Pereyra, ha expresado la angustia de la familia y la extrañeza que rodea la desaparición. “Una de las cámaras de los vecinos da a la puerta de ella y hay otra en la esquina de la plaza del barrio Autódromo, pero nos dicen que todavía no las vieron”, comentó Camila, evidenciando la frustración ante la falta de pistas concretas. La familia confía en que una estrategia coordinada con la seguridad municipal podría facilitar un mejor rastreo de la situación previa a la desaparición.
La familia ha realizado un llamado desesperado a la comunidad, solicitando cualquier información que pueda ser relevante para la investigación. “Si alguien la ve o sabe algo, por favor que se comunique al 911 o al 2233553922”, instó Camila, subrayando la importancia de la colaboración ciudadana en la resolución de este enigma.
La escena encontrada en el domicilio de Marisa y Ángeles ha añadido aún más interrogantes al caso. “Vimos que estaba todo ordenado, la cama estaba como si hubiera dormido sola sin la nena. Es raro porque cuando tenés un hijo la casa no está tan ordenada… es todo muy raro”, relató Camila, describiendo un ambiente inusual que no se condice con la presencia de una niña pequeña.
El lunes, los vecinos del barrio Autódromo ya se habían reunido en las cercanías del domicilio de las desaparecidas, ubicado en Virrey del Pino al 1400. Ahora, extenderán su reclamo a toda la comunidad marplatense, llevando su exigencia de justicia y respuestas hasta las puertas del Palacio Municipal.
La desaparición de Marisa y Ángeles ha generado una ola de solidaridad y preocupación en Mar del Plata. La comunidad se mantiene unida, exigiendo a las autoridades que no escatimen esfuerzos en la búsqueda y que se esclarezcan las circunstancias de esta misteriosa desaparición. La marcha de esta tarde representa un grito colectivo por la verdad y la justicia, un llamado a la acción para que Marisa y Ángeles regresen a casa sanas y salvas.