Un allanamiento en una residencia del barrio Jorge Newbery, originado por la investigación del robo de un teléfono móvil en un establecimiento comercial, condujo al descubrimiento de un considerable arsenal de municiones y la recuperación de prendas de vestir vinculadas al delito.
La investigación, supervisada por la fiscalía a cargo de Alejandro Pellegrinelli, se nutrió del trabajo exhaustivo del personal del Gabinete Técnico Operativo de la comisaría duodécima. Gracias a sus diligencias, lograron identificar al presunto responsable y su domicilio.
Con la autorización pertinente del Juzgado de Garantías N°2, las autoridades procedieron a allanar una propiedad ubicada en las cercanías de las calles Gascón y Paraguay. La operación resultó en la incautación de diversas prendas de vestir que se presume fueron utilizadas durante la comisión del hurto. Pero el hallazgo más sorprendente fue el de un importante número de municiones: cien proyectiles calibre .22, uno calibre nueve milímetros y un cartucho calibre 12/70.
El individuo, de 38 años de edad, fue formalmente notificado de la apertura de una causa en su contra por el delito de hurto. Sin embargo, hasta el momento, no se han dictado medidas restrictivas de su libertad.
Este caso pone de manifiesto la importancia de una investigación policial meticulosa y la efectividad de las órdenes de allanamiento para descubrir no solo los objetos directamente relacionados con un delito específico, sino también otros elementos que pueden ser indicativos de actividades ilícitas más amplias.
La posesión ilegal de municiones constituye un delito grave, y las autoridades competentes investigarán la procedencia y el destino previsto de este arsenal. La investigación buscará determinar si las municiones están vinculadas a otros delitos o si representan un peligro potencial para la seguridad pública.
El robo de teléfonos móviles, aunque aparentemente un delito menor, a menudo desencadena investigaciones que revelan actividades criminales de mayor envergadura. La colaboración entre la policía, la fiscalía y el poder judicial es fundamental para garantizar que los delincuentes sean llevados ante la justicia y que la comunidad se sienta segura y protegida.
Este incidente sirve como recordatorio de la persistente necesidad de vigilancia y prevención del delito, así como de la importancia de denunciar cualquier actividad sospechosa a las autoridades competentes. La participación ciudadana es crucial para mantener la seguridad y el orden en la comunidad.
La investigación continúa en curso, y se espera que en los próximos días se puedan obtener más detalles sobre el origen de las municiones y la posible implicación del individuo en otros delitos.