Cada 22 de noviembre, Mar del Plata se engalana para conmemorar el Día de Santa Cecilia, patrona de la ciudad. Esta tradición, arraigada en la identidad cultural marplatense desde 1896, evoca la memoria de una figura clave en la historia de la ciudad: María Cecilia Rita del Corazón de Jesús Robles Olavarrieta.
María Cecilia, esposa de Patricio Peralta Ramos, fundador de Mar del Plata, falleció tras dar a luz a su decimoquinto hijo. En su honor, Peralta Ramos mandó construir un templo en la emblemática loma, finalizado aproximadamente en 1873. La advocación elegida para este templo, erigido como homenaje a su amada, fue Santa Cecilia de Roma.
En este contexto, el intendente Guillermo Montenegro ha decretado asueto para el personal municipal el próximo 22 de noviembre, fecha de la conmemoración. Se están ultimando los detalles de diversos eventos oficiales para celebrar este día significativo para la comunidad marplatense.
Sin embargo, la decisión del asueto presenta una particularidad importante. El 22 de noviembre de este año cae en sábado. Esto significa que el beneficio del día libre se limita a aquellos empleados municipales que tengan jornada laboral ese día. Para la mayoría, el asueto no implicará un día adicional de descanso.
A pesar de esta circunstancia, la Municipalidad ha asegurado que las dependencias encargadas de cubrir servicios esenciales mantendrán las guardias necesarias para garantizar la atención a la comunidad. De esta forma, se busca equilibrar la celebración de Santa Cecilia con la continuidad de los servicios públicos indispensables.
La celebración de Santa Cecilia en Mar del Plata no es solo un acto religioso, sino también un reconocimiento a la historia y a las figuras que moldearon la ciudad. El templo dedicado a la santa, ubicado en la loma, se erige como un símbolo de la identidad marplatense y un testimonio del legado de Patricio Peralta Ramos y su esposa María Cecilia.
Aunque el asueto municipal tenga un alcance limitado este año, la conmemoración del Día de Santa Cecilia sigue siendo una oportunidad para reflexionar sobre la historia de Mar del Plata, honrar a sus fundadores y celebrar la identidad cultural que distingue a esta ciudad costera.
En resumen, el asueto del 22 de noviembre, aunque condicionado por el calendario, reafirma el compromiso de la Municipalidad con la preservación de las tradiciones y la celebración de los valores que definen a Mar del Plata. La figura de Santa Cecilia, y la historia de amor que la vincula a la fundación de la ciudad, continúan inspirando a generaciones de marplatenses.