El Colegio de Martilleros y Corredores Públicos de la provincia de Buenos Aires (Martilleros BA) ha emitido una seria advertencia sobre el incremento de maniobras fraudulentas en el sector inmobiliario. Esta alerta se dirige tanto a compradores como a vendedores, instándolos a extremar las precauciones al realizar transacciones de bienes raíces.
Según la institución, las estafas más comunes incluyen la falsificación de documentos de propiedad, la suplantación de identidad y la promesa de rendimientos irreales en inversiones inmobiliarias. Estas prácticas ilícitas no solo causan graves pérdidas económicas a las víctimas, sino que también generan desconfianza en el mercado.
Para evitar ser víctima de estos fraudes, Martilleros BA recomienda seguir una serie de precauciones fundamentales:
- Verificar la documentación: Antes de realizar cualquier pago, es crucial verificar la autenticidad de los títulos de propiedad y otros documentos relevantes. Se aconseja consultar con un escribano público para confirmar la validez de la información.
- Confirmar la identidad de las partes: Asegurarse de que la persona con la que se está negociando es realmente el propietario del inmueble o un representante legal autorizado. Solicitar documentación que acredite su identidad y poderes.
- Desconfiar de ofertas demasiado buenas: Prestar especial atención a las ofertas que parecen demasiado atractivas para ser verdad. Los precios significativamente inferiores al valor de mercado suelen ser una señal de alerta.
- Asesorarse con profesionales matriculados: Contratar los servicios de un martillero o corredor público matriculado es fundamental para garantizar la seguridad y transparencia de la operación. Estos profesionales están capacitados para detectar posibles irregularidades y brindar asesoramiento legal.
- Realizar pagos a través de canales seguros: Evitar realizar pagos en efectivo y optar por transferencias bancarias o cheques certificados. Conservar todos los comprobantes de pago.
El Colegio de Martilleros BA insta a la comunidad a denunciar cualquier sospecha de fraude inmobiliario ante las autoridades competentes. La colaboración ciudadana es esencial para combatir estas prácticas ilícitas y proteger el patrimonio de las personas.
En resumen, la clave para evitar ser víctima de un fraude inmobiliario reside en la prevención, la verificación exhaustiva de la información y el asesoramiento de profesionales matriculados. Al tomar estas precauciones, se puede reducir significativamente el riesgo de sufrir pérdidas económicas y proteger sus inversiones.