Clausura de Frigorífico en Villa Nueva: Un Riesgo para la Salud Pública
En un operativo que pone de manifiesto la importancia de la vigilancia sanitaria, un frigorífico ubicado en Villa Nueva, dentro del departamento cordobés de San Martín, ha sido clausurado por las autoridades competentes. La medida, ejecutada el pasado miércoles, responde a graves irregularidades higiénico-sanitarias detectadas en el establecimiento, así como a la comprobación de actividades de faenamiento clandestino.
La intervención fue llevada a cabo de manera conjunta por técnicos especializados del Ministerio de Bioagroindustria de la provincia y personal de la Patrulla Rural división Sur. Durante la inspección exhaustiva, los agentes verificaron que la sala destinada al faenamiento, el área de desposte y las cámaras frigoríficas presentaban deficiencias críticas que comprometían la salubridad de los productos. Estas condiciones insalubres representaban un riesgo potencial para la salud de los consumidores.
Además de las deficiencias en las instalaciones, se constató que el frigorífico carecía de la habilitación necesaria para operar legalmente. Este hallazgo agrava aún más la situación, evidenciando una falta de cumplimiento de las normativas vigentes. Según declaraciones de las autoridades, el establecimiento ya había sido objeto de advertencias e infracciones en ocasiones anteriores, lo que sugiere una persistente negligencia en el cumplimiento de las regulaciones sanitarias.
El operativo culminó con el decomiso de aproximadamente 100 kilogramos de carne bovina que no contaban con los controles sanitarios obligatorios. Esta carne, al no haber sido sometida a las inspecciones correspondientes, representaba un peligro para la salud pública, ya que podía estar contaminada con bacterias, parásitos o sustancias nocivas. Asimismo, se procedió al secuestro de diversos instrumentos y equipos utilizados para la faena clandestina, elementos que confirmaban la actividad ilegal que se desarrollaba en el lugar.
La carne incautada fue trasladada a un frigorífico debidamente habilitado, donde se llevó a cabo su destrucción controlada mediante un digestor. Este proceso garantiza la eliminación segura de los productos contaminados, evitando que puedan ingresar nuevamente a la cadena alimentaria y poner en riesgo la salud de la población.
Desde el Ministerio de Bioagroindustria se hizo un llamado a la conciencia de los consumidores, recordando que todo producto cárnico debe provenir exclusivamente de frigoríficos, mataderos y chacinados que cuenten con la habilitación correspondiente. Estos establecimientos son los únicos que garantizan la trazabilidad de los productos y cumplen con las condiciones sanitarias necesarias para asegurar la inocuidad de los alimentos.
La adquisición de carne en lugares no autorizados, como carnicerías clandestinas o vendedores ambulantes, implica un riesgo considerable de intoxicaciones y otras enfermedades transmitidas por alimentos contaminados. Por lo tanto, es fundamental que los consumidores sean responsables y exijan la procedencia legal y segura de los productos que consumen, protegiendo así su salud y la de sus familias.
Este incidente sirve como un recordatorio de la importancia de los controles sanitarios y la necesidad de que los establecimientos dedicados a la producción y comercialización de alimentos cumplan rigurosamente con las normativas vigentes. La salud pública es un bien invaluable que debe ser protegido con medidas preventivas y acciones correctivas cuando sea necesario.