Condenado a Prisión por Ataque Fatal Tras una Guiñada: Un Vistazo a la Justicia

La justicia ha dictado sentencia en un caso que conmocionó a la comunidad: un joven, Joan Brandon Le Parc, ha sido condenado a doce años de prisión por la agresión que resultó en la muerte de Juan Manuel Averillo Bonavía. El veredicto fue emitido por el Tribunal Oral en lo Criminal N°4, tras un juicio donde se presentaron pruebas y testimonios que reconstruyeron los trágicos eventos.

Le Parc, quien llegó al juicio en libertad, fue inmediatamente detenido y trasladado al complejo penitenciario de Batán, marcando un punto final, al menos por ahora, a un proceso judicial que ha mantenido en vilo a familiares y amigos de la víctima.

El panel de jueces, compuesto por Gustavo Fissore, Federico Cecchi y Fabián Riquert, también emitió un veredicto para el padre de Joan Brandon, Gustavo Le Parc, condenándolo a dos años y cuatro meses de prisión. Su delito: amenazas coactivas contra un testigo clave en la investigación, una acción que buscaba obstruir la búsqueda de la verdad y que ahora le acarrea consecuencias legales.

Sin embargo, no todos los acusados corrieron la misma suerte. Pablo Sebastián Bettes fue absuelto de todos los cargos, tras considerar el tribunal que no existían pruebas suficientes para vincularlo con el ataque. La decisión subraya la importancia de la evidencia sólida y la duda razonable en el sistema judicial.

El Incidente Detonante: Una Guiñada Fatal

La historia se remonta a la madrugada del domingo 3 de abril de 2022. Juan Manuel Averillo Bonavía se encontraba celebrando un cumpleaños en una residencia particular en el barrio Libertad. En un momento dado, Averillo Bonavía guiñó un ojo a una mujer presente en la fiesta. Este gesto, aparentemente inofensivo, desencadenó una violenta reacción por parte de dos individuos, uno de los cuales resultó ser Joan Brandon Le Parc.

El Ataque y las Consecuencias

Averillo Bonavía fue brutalmente atacado en la esquina de Balcarce y Venezuela, a escasos metros del lugar de la celebración. Los agresores utilizaron una botella como arma, infligiendo un severo traumatismo craneoencefálico a la víctima. Tras el ataque, Averillo Bonavía fue trasladado de urgencia a un centro de salud municipal, donde recibió los primeros auxilios. Dada la gravedad de sus heridas, fue posteriormente derivado al Hospital Interzonal General de Agudos (Higa), donde luchó por su vida durante cuarenta agonizantes días antes de sucumbir a las lesiones.

El Proceso Judicial

Las audiencias del juicio se llevaron a cabo la semana anterior, con la fiscal Romina Díaz liderando la acusación, tanto en el juicio como en la instrucción inicial. Pablo Sebastián Bettes contó con la asistencia de abogados de la defensa pública, mientras que Joan Brandon Le Parc y su padre fueron representados por el abogado penalista Lucas Tornini. Este último ha anunciado su intención de apelar la sentencia, lo que sugiere que la batalla legal está lejos de haber terminado.

Este caso sirve como un sombrío recordatorio de la fragilidad de la vida y las devastadoras consecuencias que pueden surgir de actos impulsivos de violencia. La sentencia impuesta a Joan Brandon Le Parc busca impartir justicia por la pérdida de Juan Manuel Averillo Bonavía y enviar un mensaje claro de que la violencia no será tolerada en la sociedad.