El Club Atlético Peñarol Llora la Pérdida de Rubén Otalvares, Pilar Fundamental de su Éxito

El Club Atlético Peñarol Llora la Pérdida de Rubén Otalvares, Pilar Fundamental de su Éxito

El mundo del baloncesto argentino, y en particular la familia del Club Atlético Peñarol de Mar del Plata, se encuentra de luto tras el sensible fallecimiento de Rubén Otalvares. Su nombre, aunque tal vez no tan resonante para las generaciones más recientes, está intrínsecamente ligado a los cimientos de la grandeza que hoy ostenta el club.

Peñarol, sinónimo de éxito y pasión en el ámbito del baloncesto nacional, no siempre gozó de la prominencia que lo caracteriza actualmente. Hubo un tiempo, a finales de la década de los ochenta, en que un grupo de visionarios, impulsados por la ambición de competir en la Liga Nacional de Básquet (LNB), se unieron para transformar un sueño en realidad. Entre esos hombres, se encontraban los hermanos Otalvares, cuya dedicación y esfuerzo fueron cruciales para el despegue del equipo marplatense.

Rubén Otalvares, junto a sus hermanos, formó parte de esa comisión directiva pionera que no solo imaginó, sino que concretó la participación de Peñarol en la LNB. Su trabajo silencioso, pero constante, contribuyó a sentar las bases para la posterior consolidación del club como uno de los grandes de Argentina, cosechando cinco títulos de la LNB y dos campeonatos de América, entre otros logros que llenan de orgullo a su afición.

La noticia del fallecimiento de Rubén ha calado hondo en la comunidad peñarolense. El club, a través de sus canales oficiales, expresó su profundo pesar y extendió sus condolencias a la familia, amigos y seres queridos del ex dirigente. “El Club Atlético Peñarol lamenta con profundo pesar el fallecimiento de Rubén Otalvares, ex dirigente, socio e hincha de nuestra institución. Acompañamos en el dolor a su familia, amigos y seres queridos en este difícil momento”, reza el comunicado emitido por la institución.

Más allá de su rol en la comisión directiva, los Otalvares desempeñaron un papel clave en la profesionalización del equipo. Fueron ellos quienes gestionaron la llegada de los primeros jugadores norteamericanos al club, un movimiento estratégico que impulsó el nivel competitivo de Peñarol y marcó un antes y un después en su historia. Roberto Otalvares, otro de los hermanos, incluso llegó a presidir la Asociación Marplatense de Básquet, demostrando el compromiso de la familia con el desarrollo del baloncesto en la región.

La partida de Rubén Otalvares representa una pérdida irreparable para la familia de Peñarol. Su legado, sin embargo, perdurará en la memoria de aquellos que vivieron los primeros años de la institución en la LNB y que reconocen su invaluable contribución al crecimiento y éxito del club. Su nombre quedará grabado como el de uno de los artífices de la grandeza de Peñarol, un hombre que soñó en grande y que, junto a sus hermanos, ayudó a convertir ese sueño en una realidad palpable.

En estos momentos de dolor, la comunidad peñarolense se une para honrar la memoria de Rubén Otalvares, un dirigente histórico que dejó una huella imborrable en el club de sus amores. Su pasión por Peñarol, su dedicación y su visión seguirán siendo una fuente de inspiración para las futuras generaciones de dirigentes, jugadores y aficionados que comparten el mismo sentimiento por la camiseta aurinegra.