El Fin de un Ciclo: Desmantelada la Calesita del Parque de los Deportes de Mar del Plata
Después de dos décadas de risas, melodías infantiles y la emoción de alcanzar la sortija, la emblemática calesita del Parque de los Deportes Teodoro Bronzini en Mar del Plata ha sido removida. Este carrusel, un ícono de la ciudad, cerró sus puertas tras la concesión del predio a la empresa Minella S.A.
Jorge Faienza, el hombre que durante años cuidó y operó la calesita, expresó su pesar ante esta situación. “Se me terminó el tiempo, no podía hacer otra cosa”, comentó con resignación mientras supervisaba el desmantelamiento. Las piezas del carrusel, cargadas de recuerdos, fueron trasladadas a diferentes ubicaciones, incluyendo su hogar, el de un vecino y un depósito. La boletería, testigo de innumerables sonrisas, fue la última estructura en ser desarmada.
Durante veinte años, la calesita fue un punto de encuentro para generaciones de niños y niñas marplatenses. Muchos atesoran recuerdos de las vueltas de tres minutos, la música pegadiza y la adrenalina de intentar atrapar la sortija. El propio Jorge Faienza recuerda con cariño sus inicios: “Cuando empecé no tenía idea de cómo funcionaba esto”, confesó entre risas, evocando los desafíos y aprendizajes que le brindó esta experiencia.
El proceso de desmantelamiento no estuvo exento de complicaciones. Jorge lamentó que el personal encargado no contara con la especialización necesaria, lo que resultó en cortes innecesarios en algunas piezas. A pesar de ello, mantiene la esperanza de volver a armar la calesita en un futuro cercano.
Un Futuro Posible: La Calesita Podría Renacer en el Parque Primavesi
La ilusión de volver a ver girar la calesita no se ha extinguido. Jorge Faienza tiene la mirada puesta en el Parque Primavesi, donde sueña con reconstruir el carrusel. Actualmente, se encuentra a la espera de la aprobación de una ordenanza por parte del Concejo Deliberante. “Ya estuvimos hablando. Ahora falta que se decidan”, explicó, mostrando optimismo ante la posibilidad de concretar este proyecto.
Mientras tanto, dedica su tiempo a restaurar y acondicionar las piezas que sobrevivieron al traslado. “Voy a casa y empiezo a preparar los postes. Tengo que ponerme las pilas con el alambrado nuevo”, detalló, demostrando su compromiso y dedicación para hacer realidad su sueño.
Jorge ha abierto la posibilidad de recibir colaboración de la comunidad para llevar adelante este proyecto. Quienes deseen contribuir pueden hacerlo a través del alias “Calesita.del.parque”. Con la ayuda de los vecinos, Jorge espera volver a escuchar pronto la música que durante dos décadas fue la banda sonora de la infancia de Mar del Plata, devolviendo a la ciudad un símbolo de alegría y tradición.