A las puertas del invierno, el Hogar Nazareth, una institución vital dependiente de Cáritas, se enfrenta a una situación crítica. La creciente demanda de refugio por parte de personas en situación de calle ha sobrepasado su capacidad, generando una profunda preocupación entre sus responsables.
Desde su apertura el 10 de diciembre de 2007, este albergue ubicado en Balcarce 5036 ha ofrecido un espacio seguro y de contención durante todo el año. Entre las 18:00 y las 8:00, proporciona a sus huéspedes algo más que un simple techo: les brinda merienda, cena, desayuno, una ducha caliente, artículos de higiene personal y ropa limpia. Un refugio integral en momentos de extrema vulnerabilidad.
Tras casi dos décadas de labor ininterrumpida, los encargados del Hogar Nazareth advierten que la situación actual es insostenible. “Hay mucha gente en la calle y estamos trabajando con el hogar completo”, explica Jorge Matías, coordinador del albergue. “Actualmente, tenemos 33 lugares para varones y 12 para mujeres (siendo el único lugar que acepta mujeres) y estamos colapsados”.
La realidad es palpable desde temprano. El personal que prepara la merienda observa cómo las personas se aglomeran en la entrada, anticipando la difícil tarea de comunicar que no hay más espacio disponible. “A mí me pone mal decir que no hay lugar”, confiesa Matías, “pero tenemos una capacidad determinada. Estamos recibiendo muchas solicitudes, y en especial hay pedidos de organismos y del Municipio para albergar a mujeres”.
La negativa implica que la persona deberá buscar otro lugar donde pasar la noche, muchas veces terminando en la calle. Para las mujeres, esta situación se agrava, especialmente cuando tienen hijos a su cargo. El coordinador señala un aumento significativo en la llegada de personas que sufren violencia de género y carecen de un lugar seguro donde refugiarse.
Recientemente, el Municipio anunció la renovación de su convenio con el Hogar Nazareth, brindando asistencia económica y el apoyo de profesionales de la salud para atender las necesidades de las personas albergadas. El hogar cuenta con un equipo interdisciplinario que recibe a los huéspedes, los entrevista y evalúa sus necesidades específicas, incluyendo problemas de consumo, adicciones o salud mental.
¿Cómo Ayudar?
Si desea colaborar como voluntario o donar ropa o alimentos, puede acercarse a Balcarce 5036 o comunicarse al (0223) 474-9795.