El destino parece ensañarse con Alejandro “Papu” Gómez. Tras cumplir una suspensión de dos años por un caso de doping, el mediocampista argentino veía la luz al final del túnel con su inminente reincorporación al Padova de Italia. Sin embargo, una lesión muscular inesperada ha vuelto a frustrar sus planes, postergando indefinidamente su esperado regreso al fútbol profesional.
La noticia ha caído como un jarro de agua fría sobre el jugador y sus seguidores, quienes aguardaban con ansias su debut en la Serie B italiana. El partido contra la Juve Stabia, correspondiente a la novena fecha del campeonato, se presentaba como el escenario ideal para su reaparición, con el técnico Matteo Andreoletti incluyéndolo en la lista de convocados. La ilusión era palpable, marcando el fin de un período de incertidumbre y alejamiento de los terrenos de juego.
El positivo en un control antidoping, detectado durante su etapa en el Sevilla de España previo al Mundial de Qatar 2022, desencadenó una suspensión que lo mantuvo alejado de la competición desde el 8 de octubre de 2023. Este incidente, sumado a su salida de la selección argentina tras la conquista del Mundial, sin explicaciones claras, ha marcado un período turbulento en la carrera del talentoso mediocampista.
La lesión muscular, sufrida en los días previos al encuentro contra la Juve Stabia, ha obligado al cuerpo técnico a actuar con cautela. “Lo sentimos por ´Papu´ desde el punto de vista personal, porque tenía muchas ganas de estar”, declaró Andreoletti, reflejando la frustración compartida por el jugador y el equipo. “Pero debemos ser prudentes, no podemos correr riesgos que no tienen sentido”, añadió, subrayando la importancia de priorizar la recuperación completa del jugador.
La incertidumbre rodea ahora la fecha de su regreso. Andreoletti se mostró reticente a fijar plazos concretos, enfatizando que Gómez volverá a jugar cuando esté en óptimas condiciones físicas. “Cuando esté al 100 por ciento desde el punto de vista de la recuperación, jugará”, aseguró el técnico. “Tiene un problema muscular que se produjo en los últimos días, no quiero dar una fecha concreta para su regreso que luego quizá no podamos cumplir”.
La prioridad, según el entrenador, es evitar forzar la situación y asegurar una recuperación total. “El objetivo es que vuelva al 100 % sin forzar, no es nada grave, pero no queremos precipitarnos ni dar una fecha límite innecesaria”, concluyó Andreoletti. La afición del Padova, y los seguidores de Gómez en general, deberán armarse de paciencia y esperar a que el talentoso mediocampista supere este nuevo obstáculo y pueda finalmente volver a desplegar su fútbol en el campo de juego.
El futuro inmediato de “Papu” Gómez es ahora una incógnita. Su regreso, que se antojaba inminente, se ha visto nuevamente postergado. Solo el tiempo dirá cuándo podrá el jugador dejar atrás este período de adversidad y retomar su carrera futbolística.