Un controvertido debate ha sacudido la legislatura de la provincia de Buenos Aires. El Senado bonaerense ha dado luz verde a la posibilidad de reelecciones indefinidas para legisladores, concejales y consejeros escolares, una decisión que ha desatado una ola de críticas y controversias en el ámbito político provincial.
La votación, marcada por una profunda división, culminó con un empate técnico: 22 votos a favor, 22 en contra y una abstención. La vicegobernadora Verónica Magario, en su rol de presidenta del Senado, tuvo que desempatar, inclinando la balanza a favor de la aprobación del proyecto. Esta ajustada victoria representa solo la mitad del camino, ya que la iniciativa aún debe ser tratada y aprobada por la Cámara de Diputados bonaerense para convertirse en ley.
El proyecto, impulsado por el senador provincial Luis Vivona y respaldado por el sector liderado por la ex presidenta Cristina Kirchner, modifica la legislación vigente, que limitaba a dos los mandatos consecutivos para senadores y diputados provinciales. Esta ley había sido promulgada durante la gestión de la ex gobernadora María Eugenia Vidal. Es importante destacar que esta modificación no afecta a los intendentes, cuyo régimen de reelección está siendo considerado en un proyecto separado, presentado por la senadora Ayelén Durán, que aún no ha sido debatido.
La aprobación en el Senado ha generado un fuerte rechazo desde diversos sectores políticos. Críticos argumentan que la alternancia en el poder es un pilar fundamental de la democracia y que la eliminación de los límites de mandato puede conducir a la perpetuación de figuras políticas en sus cargos, limitando la renovación y la representación de nuevas ideas.
Malena Galmarini, figura destacada del Frente Renovador y esposa de Sergio Massa, expresó su descontento a través de redes sociales, criticando la actitud de los legisladores que, según ella, están más preocupados por aferrarse a sus puestos que por atender las necesidades reales de la gente. “La alternancia política es base de una democracia fuerte. Muchaches, el llano no te mata, te fortalece!”, escribió Galmarini, instando a los políticos a conectarse con los problemas de la ciudadanía y a promover la renovación política.
La UCR también se sumó a las críticas, emitiendo un comunicado en el que reafirma la importancia de la alternancia para la salud de la democracia y se compromete a seguir trabajando por el fortalecimiento de las instituciones.
En una línea similar, La Libertad Avanza de la Provincia de Buenos Aires calificó la medida como un “curro” diseñado para perpetuar a la “casta” política en el poder, denunciando la falta de compromiso del Senado bonaerense con los intereses de la ciudadanía.
La controversia en torno a las reelecciones indefinidas pone de manifiesto las profundas divisiones políticas en la provincia de Buenos Aires y plantea interrogantes sobre el futuro de la representación política y la renovación de liderazgos. La decisión final recae ahora en la Cámara de Diputados, donde se espera un intenso debate sobre esta medida que podría tener un impacto significativo en el panorama político bonaerense.
Mientras tanto, la sociedad civil y los distintos actores políticos observan atentamente el desarrollo de los acontecimientos, conscientes de que la decisión que se tome en la Cámara de Diputados moldeará el futuro político de la provincia.