Escándalo en la Gendarmería Nacional: Destapan Red de Coimas en Rutas Cordobesas

Escándalo en la Gendarmería Nacional: Destapan Red de Coimas en Rutas Cordobesas

Un profundo golpe a la integridad de la Gendarmería Nacional ha sacudido la provincia de Córdoba, desvelando una presunta red de corrupción que involucra a 23 agentes. Las detenciones, algunas bajo régimen de prisión domiciliaria, son el resultado de una investigación en curso que busca esclarecer la magnitud de un esquema de cobro de sobornos a camioneros que transitaban por las rutas provinciales.

La investigación, iniciada en febrero bajo la dirección de la Fiscalía Federal de Río Cuarto, a cargo de Rodolfo Cabanillas, se originó a partir de la denuncia de un transportista. El foco inicial de la pesquisa se centró en el puesto vial de Sampacho, ubicado estratégicamente sobre la Ruta 8, pero rápidamente se expandió a otras localidades y jurisdicciones, revelando un entramado más extenso de lo que se preveía inicialmente.

Según los detalles revelados por la investigación, los gendarmes implicados interceptaban a los camioneros, argumentando supuestas irregularidades en la documentación de la carga o del vehículo. A partir de esta situación, exigían pagos ilícitos que oscilaban entre los $50.000 y los $600.000, a cambio de permitirles continuar su trayecto sin enfrentar las sanciones correspondientes, según informes de La Voz. Los pagos, según se ha podido establecer, se realizaban tanto en efectivo como a través de transferencias bancarias a cuentas de terceros, quienes presuntamente actuaban como intermediarios o “testaferros” para ocultar el origen y destino de los fondos.

La hipótesis central de los investigadores apunta a que este circuito de coimas habría estado operando desde mediados del año anterior, evidenciando una organización interna sofisticada que regulaba la recaudación y la asignación de turnos de los agentes en los puntos de control. Esta estructura, al parecer, permitía optimizar la obtención de beneficios ilícitos y minimizar el riesgo de detección.

El avance de la investigación culminó en la ejecución de 20 allanamientos simultáneos en Sampacho, Holmberg y otros puntos estratégicos de las rutas cordobesas. Sin embargo, la operación se extendió más allá de los límites de la provincia, alcanzando también territorios como Santa Fe, Catamarca y Salta, lo que sugiere la posible existencia de ramificaciones de la red en otras regiones del país. Inicialmente, el juez federal de Río Cuarto, Carlos Ochoa, ordenó la detención de 14 gendarmes, pero el número se incrementó a 23 a medida que surgieron nuevas denuncias y evidencias.

Entre los implicados en este escándalo se encuentra la jefa de seccional, Analía Galian, lo que añade un elemento de gravedad a la situación. De los 23 sospechosos, 13 se encuentran actualmente recluidos en la cárcel de Bouwer, mientras que el resto cumple arresto domiciliario, a la espera de que se defina su situación procesal.

La Justicia investiga a los gendarmes por una serie de delitos graves, que incluyen asociación ilícita, extracciones ilegales y abuso de autoridad. Las autoridades no descartan la posibilidad de que en los próximos días se produzcan nuevas imputaciones y se implementen cambios internos en la fuerza, con el objetivo de depurar la institución y prevenir futuros actos de corrupción.

Según la línea de investigación, el esquema de cobro de coimas operó entre mediados de 2024 y septiembre de 2025, con una organización interna que gestionaba los turnos de recaudación y la distribución del dinero obtenido de manera ilícita. Este detalle subraya la complejidad y el nivel de planificación que caracterizaba a la presunta red de corrupción.