Incidente en un Hotel: Pasión, Destrucción y una Orden Judicial Pendiente
La tranquilidad de un hotel alojamiento ubicado en la intersección de las calles Gascón y Buenos Aires se vio abruptamente interrumpida en las primeras horas del martes. Una llamada al 911 alertó sobre “destrozos en la habitación donde hay una pareja”, movilizando a las autoridades a la escena.
Según el reporte inicial, empleados del establecimiento fueron quienes realizaron la llamada, describiendo una situación caótica en una de las habitaciones. Al arribo de los oficiales del Comando de Patrullas, la pareja ya había abandonado el lugar a bordo de una motocicleta, dejando tras de sí un rastro de destrucción.
Gracias a la rápida acción y la información proporcionada por el Centro de Operaciones y Monitoreo (COM), los oficiales lograron interceptar a la pareja en las cercanías de las calles España y Balcarce. Durante la detención, se confiscó un bate de béisbol que la mujer portaba, presuntamente utilizado para causar los daños en la habitación del hotel.
La motocicleta en la que viajaban presentaba signos de manipulación, con el tambor de encendido forzado. Aunque no registraba impedimentos legales para circular, la moto fue secuestrada debido a las múltiples infracciones de tránsito acumuladas.
El hombre, identificado como un individuo de 55 años, enfrentará una contravención por su participación en el incidente. Sin embargo, la situación de la mujer, de 22 años, es considerablemente más compleja. Fue notificada de una causa por Daños, siendo señalada como la principal responsable de los destrozos ocasionados en el hotel.
Pero la historia no termina ahí. Al verificar la identidad de la joven, las autoridades descubrieron que sobre ella pesa una orden de internación desde el mes de febrero, emitida por el Juzgado de Familia N°5. Esta orden judicial añade una nueva dimensión al caso, planteando interrogantes sobre el estado mental y emocional de la joven.
Ante esta revelación, el fiscal Guillermo Nicora tomó la decisión de trasladar a la mujer a los Tribunales, donde se evaluará su situación y se determinará el procedimiento a seguir. Posteriormente, se resolverá su traslado a un hospital, en cumplimiento de la orden de internación vigente.
Este incidente, que comenzó como una simple denuncia de destrozos en un hotel, ha escalado hasta revelar una situación personal delicada, con implicaciones legales y de salud mental. Las autoridades continúan investigando los detalles del altercado en el hotel, mientras que la joven se encuentra a disposición de la justicia para recibir la atención y el tratamiento necesarios.
El caso pone de manifiesto la complejidad de las relaciones humanas y cómo situaciones aparentemente triviales pueden desencadenar eventos con consecuencias significativas. La investigación en curso buscará esclarecer los motivos detrás de la pelea en el hotel y determinar las responsabilidades de cada uno de los involucrados.