Mientras L-Gante disfruta de su tiempo en Mallorca, acompañado por la “Mafilia” y la figura mediática Wanda Nara, enfrenta una denuncia formal interpuesta por su ex pareja, Tamara Báez. La razón detrás de esta acción legal reside en el presunto incumplimiento del cantante en el pago de la cuota alimentaria destinada a su hija.
La noticia, revelada por el periodista Gustavo Méndez en el programa Mujeres Argentinas, indica que L-Gante será notificado de manera oficial tan pronto como regrese a territorio argentino. El documento presentado por Méndez respalda la afirmación de que el artista de cumbia 420 no se encuentra al día con las obligaciones financieras correspondientes al bienestar de su hija.
Según lo expuesto por el periodista, la cuota alimentaria originalmente acordada entre L-Gante y Tamara Báez ascendía a 5.000 dólares mensuales. Sin embargo, el abogado de Báez, Juan Pablo Merlo, detalló que la situación ha sido más compleja. “La primera sentencia fue en 2022. Tamara y L-Gante llegaron a un acuerdo. Habían regulado una cuota de 5.000 dólares y él la convenció de que firmara por 300.000 pesos”, explicó Merlo.
La defensa de Báez argumenta que la suma que actualmente recibe no es suficiente para cubrir las necesidades de la menor. “Tamara se dio cuenta de que no le alcanza para nada. Hoy está recibiendo 700.000 pesos”, afirmó el abogado. Además, Merlo asegura que el incumplimiento en los pagos se ha extendido por varios meses. “Hace cuatro meses que no está cumpliendo. Estuvo años pagando una miseria… Él está en el registro de deudores porque no le pasa lo que le tiene que pasar a la hija… No quiere pagar, prefiere gastarla en otra cosa”, aseveró.
Ante esta situación, el equipo legal de Tamara Báez ha tomado medidas para garantizar el bienestar de la niña. “Nosotros pedimos un provisorio de 5.000 dólares. Hoy el juez dio eso. No quiere decir que no pueda ser más. Es una persona con ingresos”, detalló Merlo, enfatizando la capacidad económica del cantante.
El abogado también hizo hincapié en la importancia de que el nivel de vida de la hija refleje la situación económica del padre. “Si al padre le va bien, a la hija le tiene que ir bien. Pero él tiene todo en negro y no tiene nada a nombre de él”, concluyó Juan Pablo Merlo, sugiriendo posibles estrategias del cantante para evitar el cumplimiento de sus obligaciones financieras.
Este caso ha generado un gran revuelo mediático, poniendo en el centro del debate la responsabilidad de los padres en el cumplimiento de las cuotas alimentarias y el derecho de los niños a recibir el apoyo económico necesario para su desarrollo.