En una resolución reciente, el Juez Federal Santiago Inchausti ordenó la liberación de Mauricio Di Norcia, un hombre dedicado a la compraventa de automóviles que había sido detenido en abril de 2023 bajo la acusación de lavado de activos. La decisión judicial se produjo a raíz de una solicitud presentada por la defensa de Di Norcia, marcando un giro significativo en un caso que ha captado la atención pública.
Di Norcia, cuyo nombre también surgió en la investigación relacionada con el robo millonario a varios departamentos en Mar del Plata y en la causa que involucra la presunta Asociación Ilícita Mixta liderada por el ex jefe Departamental José Luis Segovia, había sido acusado de utilizar ganancias provenientes de actividades ilícitas para realizar maniobras financieras destinadas a integrar esos fondos en el mercado formal. Esta acusación de lavado de activos lo mantuvo tras las rejas durante dos años y medio.
Bernardo Palumbo, el abogado penalista defensor de Di Norcia, expresó su satisfacción ante la resolución judicial. Destacó que esta decisión se alinea con la atenuación de las medidas cautelares que ya se había logrado el año anterior. “Celebro el criterio tanto de la Cámara Federal local como del Juzgado al haber dispuesto el cese de la prisión preventiva, ya que veníamos con planteos de esa índole desde principio de año”, afirmó Palumbo.
En la argumentación presentada ante el tribunal, Palumbo hizo hincapié en el prolongado tiempo transcurrido desde el inicio de la investigación, que ya alcanza los seis años. Subrayó que, a pesar de este extenso período, aún no se ha solicitado la elevación de la causa a juicio, y que incluso no se vislumbra una fecha cercana para el inicio del debate oral, estimándose que podría no tener lugar hasta después de 2027. El abogado argumentó que mantener a su defendido en prisión preventiva hasta esa fecha resultaría “desajustado a derecho”, ya que excedería ampliamente el mínimo de la pena que podría corresponderle en caso de ser hallado culpable.
Palumbo recordó que, al momento de dictarse la prisión preventiva de Di Norcia, se le imputaban cuatro delitos precedentes: una condena del año 2014 por encubrimiento, una causa por el delito de estafa que tramita ante el Juzgado en lo Correccional N°3, la investigación por los robos millonarios a departamentos y la del robo al departamento de Cabo Corrientes.
Sin embargo, la situación procesal de Di Norcia ha evolucionado significativamente. “En el expediente correccional se ha dictado la extinción de la acción penal, en la del robo en Cabo Corrientes se dictó su sobreseimiento, y en la causa de la banda de los millones fue decretada su excarcelación”, explicó Palumbo. Con estas resoluciones favorables en las otras causas, Di Norcia permanecía detenido únicamente a disposición del Juzgado Federal N°3 por la acusación de lavado de activos, situación que ahora ha cambiado con su reciente liberación.
La liberación de Di Norcia plantea interrogantes sobre el futuro de la investigación por lavado de activos y sobre la posibilidad de que la causa finalmente llegue a juicio. También pone de relieve la importancia de garantizar el cumplimiento de los plazos razonables en los procesos judiciales, evitando que las personas permanezcan detenidas preventivamente por períodos excesivos, especialmente cuando la elevación a juicio se demora indefinidamente.