La afirmación del Municipio de General Pueyrredon sobre la realización de 55.000 operativos de control al transporte ilegal ha desatado una fuerte controversia con el sector de taxistas y remiseros de Mar del Plata. Estos trabajadores, que desde hace tiempo denuncian la falta de fiscalización de las aplicaciones de transporte a pesar de su prohibición por ordenanza, califican las cifras municipales como un “chamuyo” y exigen mayor transparencia.
Según un oficio judicial presentado por la Municipalidad, desde 2019 se habrían llevado a cabo estas numerosas actuaciones en la vía pública, incluyendo controles al transporte no regulado. Sin embargo, la Federación Nacional de Conductores de Taxi, delegación Mar del Plata, ha expresado su “profunda preocupación” ante estas declaraciones, poniendo en duda la veracidad de las cifras.
La federación, a través de su representante legal, ha solicitado formalmente el detalle de las actas labradas, así como la identificación de los juzgados donde se tramitaron aquellas actuaciones que resultaron en multas y secuestros de vehículos. Esta petición busca verificar la magnitud real de los controles y determinar si corresponden efectivamente a la lucha contra el transporte ilegal.
Darío López, secretario adjunto de la federación, ha sido especialmente crítico con la información proporcionada por el gobierno municipal. En declaraciones, López calificó la cifra de 55.000 multas como “una locura” y reafirmó la desconfianza del sector. “Queremos hacer un seguimiento de las actas, en qué juzgado cayeron, porque es una locura lo que están diciendo”, señaló.
El dirigente también enfatizó que la lucha del sector no está dirigida contra las personas que trabajan de forma ilegal, sino que buscan su regularización. En este sentido, López reclamó la entrega de 500 licencias de taxi que, según afirma, el gobierno municipal mantiene retenidas. “Por qué no las entregan a la gente y se crea trabajo genuino, con seguridad social”, cuestionó.
López acusó al intendente de actuar por intereses particulares, sugiriendo que se ha “comprado la voluntad para que las plataformas bajen a la Mar del Plata”, sin importar la existencia de una ordenanza que las prohíbe. Esta acusación añade un elemento de tensión política a la ya compleja situación del transporte en la ciudad.
En contraste con la supuesta inacción municipal, López valoró positivamente los operativos realizados recientemente por el Ministerio de Transporte bonaerense en Mar del Plata. Según el dirigente, estos controles han arrojado resultados positivos, evidenciando la impunidad con la que operan algunos transportistas ilegales. “Tuvimos muy buenos los resultados con los operativos, hay tanta impunidad que a los pasajeros los llevan atrás. En un mediodía día fueron 24 autos multados”, concluyó.
La polémica en torno a los controles del transporte ilegal en Mar del Plata continúa generando debate y tensión entre el sector de taxistas y el gobierno municipal. La falta de transparencia en las cifras y las acusaciones cruzadas dificultan la búsqueda de una solución que beneficie a todos los actores involucrados.