Polémica en un Buffet Universitario: Dueños Denuncian a Empleada por Destrozos y Niegan Maltrato
Un incidente en un buffet dentro de la Facultad de Derecho ha desatado una controversia que ha escalado desde las redes sociales hasta los tribunales. Jennifer, una joven empleada, protagonizó un video en el que se la ve destrozando el local. Las imágenes, capturadas y difundidas por ella misma, rápidamente se viralizaron, atrayendo la atención de medios nacionales y, finalmente, desencadenando acciones legales.
Juan Berges, el propietario del emprendimiento, ha negado rotundamente las acusaciones de maltrato laboral que Jennifer esgrimió como justificación para su accionar. En declaraciones, Berges anunció la presentación de una denuncia penal contra la joven. “Ya presentamos una demanda judicial porque rompió muchas cosas. Vamos a ir a fondo con eso y, si ella quiere, que responda, pero estamos seguros de que no hubo ningún tipo de maltrato”, afirmó, mostrando su determinación de llevar el caso hasta las últimas consecuencias.
Berges expresó su desconcierto ante la situación, cuestionando las motivaciones de Jennifer. “No entendemos qué pretende, qué quiere con todo eso porque le queda un antecedente muy malo. Nosotros le dimos una oportunidad de trabajar y es imposible que mi socia la haya tratado mal. Realmente no hay ninguna causa que la haya hecho reaccionar así”, recalcó, defendiendo la integridad de su equipo y las oportunidades brindadas a la joven.
La difusión del video generó diversas reacciones. La Unión de Trabajadores del Turismo, Hoteleros y Gastronómicos de la República Argentina (Uthgra) manifestó su apoyo a Jennifer, quien denunció haber trabajado sin contrato desde su ingreso en marzo. Sin embargo, Berges considera que el video revela una actitud premeditada por parte de la empleada.
“Hay una actitud dolosa; tenemos videos donde se ve que lo hace en forma calculada, pensada, que pone a grabar y hace todo como guionado. Lo cierto es que hizo un acting; podés tener un ataque de locura pero no hacer las cosas así”, insistió, refiriéndose a la aparente planificación y puesta en escena del incidente capturado en video.
Además de negar el maltrato, Berges desmintió las acusaciones sobre la venta de comida en mal estado, aclarando que no elaboran alimentos en el local. Aseguró que el resto de las empleadas pueden atestiguar el trato cordial que reciben en el trabajo.
“Las tareas eran las habituales de un lugar así, quiero hacer énfasis en que no hubo un maltrato”, concluyó Berges, reafirmando su postura y defendiendo la reputación de su negocio.
La controversia continúa, con la denuncia penal en curso y las acusaciones de maltrato laboral y la defensa de los dueños del buffet generando un debate sobre las condiciones laborales y la responsabilidad individual en el ámbito laboral.