Con la fecha límite del 9 de julio acercándose rápidamente, el panorama político en la provincia de Buenos Aires se recalienta. La presentación de alianzas para las elecciones del 7 de septiembre se ha convertido en un punto de inflexión, especialmente en Mar del Plata, donde la coalición gobernante enfrenta una encrucijada.
El esperado frente entre La Libertad Avanza (LLA) y el Pro parece concretarse, dejando al histórico aliado, la Unión Cívica Radical (UCR), fuera de la ecuación. Esta situación plantea interrogantes cruciales sobre el futuro de la alianza de gobierno liderada por el intendente Guillermo Montenegro en la ciudad costera.
Aunque la ruptura electoral no implica necesariamente la disolución del acuerdo de gestión, la tensión es palpable. La posible incorporación de figuras libertarias al gabinete municipal añade una capa adicional de incertidumbre al escenario político marplatense.
Voces Desde Adentro: Pro y UCR Expresan sus Posturas
Emiliano Giri, referente del Pro en Mar del Plata, confirmó que el acuerdo con La Libertad Avanza está prácticamente cerrado. Por otro lado, Gustavo Serebrinsky, presidente de la UCR local y funcionario del gobierno de Montenegro, reconoció que el radicalismo está en pleno debate interno, barajando distintas opciones.
Serebrinsky describió tres posibles caminos para la UCR: presentarse en solitario, formar una alianza de centro con sectores del kirchnerismo y el mileísmo, o mantener la alianza con el Pro, reviviendo la coalición Cambiemos.
La Convención Provincial Radical: Un Punto de Inflexión
La Convención Provincial de la UCR, celebrada este martes en La Plata, fue clave para definir la estrategia electoral del partido. La decisión tomada allí tendrá un impacto directo en la relación con el Pro en Mar del Plata, donde la UCR juega un papel fundamental en la gobernabilidad.
Serebrinsky destacó el rol de la UCR en la gestión municipal desde 2019, resaltando la labor de sus funcionarios y concejales para garantizar la gobernabilidad. La UCR ostenta la presidencia del Concejo Deliberante, cuenta con un bloque de cinco concejales y lidera secretarías clave como Participación Ciudadana, Desarrollo Social, Educación y Obras, además de controlar la empresa estatal Osse.
El propio Serebrinsky reconoció que, si bien el acuerdo con el Pro se mantiene hasta 2027, la situación es fluida y la continuidad del acuerdo dependerá de las decisiones que tomen los actores involucrados. Estas declaraciones se suman a las expresiones previas del diputado provincial radical Diego Garciarena, quien advirtió que un acuerdo prioritario entre el Pro y La Libertad Avanza pondría en duda la continuidad de la UCR en el gobierno municipal.
El Pro Concentrado en el Acuerdo con LLA
Mientras tanto, el Pro se enfoca en ultimar los detalles del acuerdo con La Libertad Avanza. Giri afirmó que el acuerdo está avanzado en un 90% y que se están analizando las particularidades de cada uno de los 135 distritos de la provincia para concretar la alianza.
Giri reconoció que existen tensiones en algunos distritos entre figuras libertarias y miembros del Pro, aunque aseguró que este no es el caso en Mar del Plata, donde Montenegro ha acercado posiciones con Alejandro Carrancio, líder de los libertarios y exconcejal de Juntos por el Cambio.
Ante la pregunta sobre la posible inclusión de aliados del Pro en Mar del Plata, como la UCR y la Coalición Cívica, en el frente con LLA, Giri se mostró evasivo, señalando que esa es una pregunta que deben responder los dirigentes de esos partidos.
El escenario político en Mar del Plata se presenta dinámico e incierto. La decisión de la UCR de separarse o no del Pro en las elecciones bonaerenses definirá el futuro de la alianza de gobierno y la estabilidad política en la ciudad costera. Las próximas semanas serán cruciales para determinar el rumbo que tomará la política marplatense.