Taxistas de Mar del Plata claman por alivio fiscal ante una crisis sin precedentes

En un contexto económico desafiante y con la creciente competencia del transporte no regulado, los taxistas de Mar del Plata han intensificado su llamado a las autoridades municipales para que reduzcan las tasas impositivas que gravan su actividad. La solicitud, elevada al Concejo Deliberante, busca mitigar el impacto de una situación que los profesionales del volante describen como “nunca antes vista”.

Miguel González, líder de la Federación Nacional de Conductores de Taxis en Mar del Plata, ha sido la voz principal de este reclamo. En recientes declaraciones, González enfatizó la necesidad urgente de una disminución en la tasa de transferencia de licencias, al tiempo que criticó la inacción del municipio frente a la proliferación del transporte ilegal. Según sus palabras, el sector está experimentando una crisis “inédita”.

“La petición que hemos presentado al Concejo Deliberante busca, al menos, una reducción en algunos de los impuestos que pesan sobre nuestra actividad. La realidad que enfrentamos es extremadamente difícil”, explicó González. El líder gremial lamentó la “gran pérdida de ingresos” que están sufriendo los taxistas debido a la falta de control municipal y el incumplimiento de las ordenanzas vigentes.

González hizo referencia específica a la ordenanza 23.928, que regula el servicio de transporte de pasajeros en la ciudad. Según su denuncia, esta normativa no se está aplicando de manera efectiva, lo que permite la operación de plataformas de transporte que considera ilegales. “Desgraciadamente, lo que estamos viviendo ahora no tiene precedentes. Cada vez es más complicado cumplir con las obligaciones para mantener un vehículo habilitado”, aseveró.

El representante de los taxistas detalló los múltiples costos que deben afrontar los conductores para operar dentro de la legalidad: “Tenemos la inspección anual, que implica el pago de un impuesto para poder trabajar; se nos cobra el certificado de antecedentes… Cada vez tenemos más gastos y menos ingresos”.

Ante la pregunta sobre la posibilidad de eliminar por completo la tasa de transferencia, González respondió con franqueza: “Se podría eliminar, pero no depende de nosotros”. Dejó claro que la decisión final recae en las autoridades municipales.

Si bien reconoció que la crisis económica nacional está afectando a todos los sectores, González hizo hincapié en que existen factores locales que agravan aún más la situación de los taxistas marplatenses: “No somos ajenos a la realidad del país, pero hay cosas que nos están perjudicando de manera directa”.

Otro punto crítico señalado por el líder gremial es la renovación de las unidades. “El plazo para cambiar unos 400 coches vence en marzo. No sabemos cómo se va a cumplir con esto. Cada vez es más difícil”, advirtió, anticipando posibles problemas para los taxistas que deben renovar sus vehículos en los próximos meses.

Finalmente, González reiteró su crítica a la competencia ilegal: “Tenemos una competencia desleal que lo único que ha traído es precio barato, nada más”. Esta afirmación subraya la preocupación de los taxistas por la calidad del servicio y la seguridad de los pasajeros, aspectos que consideran comprometidos por la operación de plataformas no reguladas.

En resumen, los taxistas de Mar del Plata se encuentran en una situación apremiante, presionados por la crisis económica, la competencia desleal y la carga impositiva. Su llamado a las autoridades municipales busca un alivio fiscal que les permita seguir operando y brindando un servicio esencial a la comunidad.