Tensión en Playa Grande: Taxistas alzan la voz contra el transporte ilegal y exigen medidas urgentes

Tensión en Playa Grande: Taxistas alzan la voz contra el transporte ilegal y exigen medidas urgentes

La controversia en torno al transporte gestionado a través de aplicaciones móviles continúa escalando en Playa Grande, donde los taxistas han intensificado sus reclamos ante lo que consideran una inacción preocupante por parte de las autoridades municipales. La Federación Nacional de Conductores de Taxi ha emitido una enérgica denuncia pública, señalando un “descontrol” generalizado y demandando una intervención inmediata del Intendente Guillermo Montenegro.

La Federación argumenta que la falta de supervisión y regulación por parte de las autoridades competentes ha permitido que el transporte ilegal opere con total impunidad, lo que pone en riesgo tanto la seguridad de los pasajeros como la estabilidad económica de los taxistas debidamente registrados. Esta situación ha sido llevada a los tribunales, donde, si bien no se logró una medida cautelar para suspender las aplicaciones, se obtuvo un pronunciamiento judicial que insta al Municipio a intensificar los controles.

Los taxistas denuncian que, amparados en esta falta de control, operan vehículos con vidrios polarizados y sin la habilitación correspondiente, lo que representa un peligro para la seguridad de los usuarios. Advierten que tanto conductores como pasajeros se encuentran expuestos a situaciones de riesgo, especialmente las mujeres que utilizan estos servicios durante la noche.

La Federación de taxistas insiste en la vulnerabilidad a la que se enfrenta el sector del transporte formalizado. Argumentan que la falta de regulación genera una competencia desleal que perjudica gravemente a los trabajadores que cumplen con todas las normativas y obligaciones legales.

La Federación ha dirigido sus críticas directamente a funcionarios del gobierno municipal, responsabilizando al Director de Transporte, Federico Chioli, y al Intendente Guillermo Montenegro de cualquier incidente que pueda ocurrir como consecuencia de la falta de acción y control en la zona. La entidad ha recordado que se encuentra en estado de alerta y movilización, e insta a otras organizaciones a sumarse a sus reclamos y a participar en acciones directas en Playa Grande.

“Es imperativo que las autoridades escuchen nuestras demandas y actúen en consecuencia”, sentenciaron desde la Federación, subrayando la urgencia de una respuesta efectiva para garantizar la seguridad de los usuarios y la equidad en el sector del transporte.

La situación en Playa Grande refleja una problemática que se extiende a otras ciudades, donde la convivencia entre los servicios de transporte tradicionales y las nuevas plataformas digitales genera tensiones y desafíos regulatorios. El debate sobre la legalidad, la seguridad y la competencia leal continúa abierto, y exige soluciones integrales que contemplen los intereses de todos los actores involucrados.

La Federación de taxistas ha reiterado su compromiso de seguir luchando por sus derechos y por la defensa de un servicio de transporte seguro, regulado y accesible para todos los ciudadanos. Anuncian que continuarán explorando todas las vías legales y de movilización social para lograr que sus reclamos sean escuchados y atendidos por las autoridades competentes.