Tensión Vecinal en Cerrito Sur: Pastor Evangélico Acusado de Matar a un Perro
Un clima de crispación se apoderó del barrio Cerrito Sur en las últimas horas, tras la denuncia de varios vecinos contra un pastor evangélico, a quien acusan de haber asesinado a un perro. La acusación, que ha generado una profunda indignación en la comunidad, se basa en la supuesta molestia del pastor por el hábito del animal de, según él, romper las bolsas de basura.
La controversia se centra en un incidente ocurrido en la intersección de las calles Fleming y Lebensohn, donde, según los denunciantes, el pastor habría atacado al perro, causándole la muerte. La acusación ha desatado una ola de reacciones, especialmente entre los dueños del animal, quienes niegan rotundamente la versión del pastor.
La Versión de los Dueños del Perro
Los dueños del perro, visiblemente afectados por la pérdida, han calificado la acusación como absurda e infundada. Argumentan que el perro, de tamaño pequeño, era físicamente incapaz de alcanzar las bolsas de basura colocadas en los canastos. Esta contradicción entre la versión del pastor y la de los dueños del animal ha exacerbado aún más la tensión en el barrio.
Evidencia en Video y la Indignación Vecinal
Videos del altercado, que circularon rápidamente en redes sociales, muestran una acalorada discusión entre los dueños del perro y el pastor acusado. En las imágenes, se puede observar el cuerpo sin vida del animal, generando escenas de dolor y consternación entre los vecinos, incluyendo niños que lloraban desconsoladamente junto al cadáver.
En uno de los fragmentos de video, se escucha a una vecina expresar su indignación: “Me mató el perro de una puñalada. Es un perro chiquitito. Después se hace el hijo de Dios”. Esta declaración, cargada de emotividad, refleja el sentir generalizado de la comunidad, que se siente traicionada por la aparente contradicción entre las acciones del pastor y sus principios religiosos.
Según la denuncia formal, el agresor habría declarado haberle dado un tiro al animal. Esta inconsistencia entre la declaración grabada y la denuncia formal añade complejidad al caso y alimenta la controversia.
La Defensa del Acusado
En su defensa, el pastor acusado respondió a las acusaciones afirmando que “Tu perro me tiene podrido rompiendo las bolsas”. Esta justificación, lejos de calmar los ánimos, ha sido interpretada por muchos como una admisión de culpabilidad y ha intensificado la indignación vecinal.
Consecuencias y Repercusiones
El incidente ha generado un profundo debate en la comunidad sobre el respeto a los animales, la responsabilidad ciudadana y la coherencia entre las palabras y las acciones, especialmente en figuras de autoridad religiosa. Las autoridades locales han sido alertadas sobre la situación y se espera que se inicie una investigación para esclarecer los hechos y determinar las responsabilidades correspondientes.
Este trágico suceso ha dejado una profunda cicatriz en el barrio Cerrito Sur, poniendo de manifiesto la importancia del diálogo, la tolerancia y el respeto mutuo para mantener la armonía y la convivencia pacífica en la comunidad.