Triple Femicidio: Nuevos Audios Incriminan a ‘El Chato’ en la Logística del Crimen
La investigación del brutal asesinato de Brenda del Castillo, Morena Verdi y Lara Gutiérrez ha dado un giro significativo con la aparición de nuevas pruebas que señalan directamente a Víctor Lázaro Sotacuro, conocido en el bajo mundo como “El Chato”. Estas evidencias, reveladas por el periodista Ignacio González Prieto, sugieren un rol crucial de Sotacuro en la organización y ejecución del triple femicidio, específicamente en la logística del crimen.
Según las investigaciones, “El Chato” alquilaba una cochera en la zona de Bajo Flores, utilizada como depósito de los vehículos empleados tanto para el traslado de las víctimas como de los presuntos sicarios. Esta función logística lo coloca en una posición comprometedora, vinculándolo directamente con la planificación y el desarrollo del crimen.
Revelaciones en Audios: Confesiones y Encubrimiento
Un elemento clave en la investigación es la transcripción de conversaciones telefónicas. En particular, un audio entre la pareja de Sotacuro y un vecino ha sido incorporado como prueba fundamental. En este audio, la pareja de “El Chato” confiesa: “El ‘Chato’ se mandó una c… Le hizo de remís al ‘Tarta’ y se llevaron a las tres pibas que mataron”. Esta declaración, aunque intenta atenuar la responsabilidad de Sotacuro al agregar “Capaz él no sabía que las iban a matar”, lo sitúa innegablemente en la escena del crimen.
Además, se ha revelado que Sotacuro intentó activamente borrar evidencia crucial. Un mensaje de texto enviado a su pareja decía: “No te preocupes, ya prendí fuego la camioneta”, confirmando sus esfuerzos por encubrir su participación y la de otros involucrados.
Captura y Extradición
Tras el crimen, Sotacuro huyó del país, siendo capturado el 26 de septiembre en Villazón, Bolivia, después de cruzar la frontera desde Jujuy. Un mensaje revelador lo delató: “Tengo miedo y hambre. Ya crucé a Bolivia. No quería irme en colectivo”. La respuesta de su novia, instándolo a regresar a Argentina y no entregarse, sugiere un conocimiento previo de la gravedad de su situación. Finalmente, fue detenido en un hostel y trasladado en avión a Ezeiza para enfrentar la justicia.
Los Autores Materiales y el Autor Intelectual
La investigación apunta a dos hombres peruanos, de 39 y 45 años, con el mismo apellido, como los presuntos autores materiales del triple femicidio. Se presume que estos individuos, con antecedentes de salidas del país, torturaron y asesinaron a las jóvenes en una casa de Florencio Varela. Según el expediente, los sicarios salieron del lugar “embarrados y manchados con sangre” y amenazaron a Sotacuro para que guardara silencio, advirtiéndole sobre las consecuencias si hablaba.
La figura de Tony Janzen Valverde, alias “Pequeño J”, emerge como el presunto autor intelectual del crimen. Se cree que Valverde se reunió con los sicarios en José C. Paz antes de huir a Bolivia y luego a Perú, donde fue detenido. Actualmente, la Justicia está analizando siete teléfonos celulares pertenecientes a los nueve detenidos hasta el momento. Se espera que el análisis de estos dispositivos revele información crucial sobre el rol de cada uno de los implicados en este horrendo crimen.
La investigación continúa, y se espera que en los próximos días se esclarezcan aún más los detalles de este caso que ha conmocionado a la opinión pública.