Violento Asalto en Mar del Plata: Motociclista Atacado y Robado

La tranquilidad de la madrugada en el barrio El Progreso de Mar del Plata se vio abruptamente interrumpida cuando Andrés, un joven de 22 años, fue víctima de un brutal asalto. El incidente, ocurrido el lunes, dejó al descubierto la creciente inseguridad que azota la ciudad, con delincuentes que no dudan en recurrir a la violencia para lograr sus objetivos.

Andrés, quien se ganaba la vida como filetero en una empresa del puerto, regresaba a su hogar tras una larga jornada laboral. Alrededor de las 2:30 de la mañana, mientras circulaba por las calles Valentini y Tripulantes del Fournier, fue interceptado por un grupo de individuos que lo perseguían en un automóvil con claras intenciones de robarle su motocicleta.

La víctima, al percatarse de la amenaza, intentó desesperadamente escapar. En una maniobra audaz, intentó subir a la vereda con su moto Honda Twister 250, buscando ganar ventaja y evadir a sus agresores. Sin embargo, la suerte no estuvo de su lado. El pavimento mojado traicionó su intento de fuga, provocando que perdiera el control del vehículo y cayera al suelo.

Este desafortunado incidente marcó el inicio de un calvario para Andrés. Los delincuentes, aprovechando su vulnerabilidad, descendieron rápidamente del automóvil. Uno de ellos se dirigió directamente hacia la motocicleta, con la clara intención de apoderarse de ella. El otro, en cambio, se abalanzó sobre Andrés, apuntándole con un arma de fuego y exigiéndole sus pertenencias.

La situación se tornó aún más violenta cuando el delincuente, frustrado por la resistencia de Andrés, comenzó a golpearlo repetidamente en la cara con la culata del arma. Entre amenazas de muerte, exigía la entrega del teléfono móvil y la campera de la víctima. A pesar del peligro inminente, Andrés se negó a ceder, defendiéndose con valentía de sus agresores.

Finalmente, ante la imposibilidad de someter a Andrés y robarle sus pertenencias, los delincuentes optaron por huir. Uno de ellos abordó nuevamente el automóvil, mientras que el otro se llevó la motocicleta de Andrés, dejándolo herido y despojado de su medio de transporte y herramienta de trabajo.

Tras el violento incidente, Andrés radicó la denuncia correspondiente en la comisaría tercera, jurisdicción responsable de la zona. A pesar del trauma sufrido, la víctima se mostró decidida a colaborar con la justicia, afirmando recordar los rostros de sus agresores y estar dispuesto a identificarlos para que respondan por sus actos.

Este lamentable suceso pone de manifiesto la creciente ola de inseguridad que afecta a Mar del Plata, donde los delincuentes actúan con total impunidad, sin importarles el daño físico y emocional que causan a sus víctimas. La comunidad exige a las autoridades medidas urgentes y efectivas para combatir la delincuencia y garantizar la seguridad de los ciudadanos.

El caso de Andrés sirve como un crudo recordatorio de la vulnerabilidad a la que están expuestos los trabajadores que se ven obligados a transitar por las calles de la ciudad en horarios nocturnos. Es fundamental que se refuercen los patrullajes policiales y se implementen estrategias de prevención del delito para proteger a los ciudadanos y evitar que se repitan este tipo de incidentes.