Wanda Nara, figura destacada del espectáculo argentino, ha revelado detalles sorprendentes sobre sus relaciones pasadas durante su participación en el programa “Fernet con Grego”, conducido por Grego Rosello y transmitido a través del streaming de Telefe. La empresaria y personalidad mediática se sinceró sobre los momentos críticos que marcaron sus separaciones amorosas, haciendo referencia explícita a sus vínculos con Maxi López, Mauro Icardi y el reconocido cantante de cumbia, L-Gante (Elian Valenzuela).
En un tono distendido y revelador, Wanda Nara compartió las inusuales propuestas que recibió de sus ex parejas en momentos de ruptura. “Cuando me separé de Maxi, me propuso tener una nena. Con Mauro, la propuesta fue buscar un varón. Y Elián, cuando decidimos separarnos, ¡me propuso casamiento!”, confesó la mediática, dejando atónitos a los presentes. A pesar de las singulares ofertas, Wanda Nara afirmó que rechazó todas las propuestas, optando por no continuar con ninguno de los romances.
La empresaria también reflexionó sobre su rol en las relaciones, destacando su compromiso y lealtad. “Cuando conozco a una persona, trato de que crezca, de que se potencie y sea mejor. Soy muy leal en mis relaciones”, aseveró. Sin embargo, reconoció que las rupturas amorosas la afectaban profundamente, llevándola a buscar ayuda profesional. “Soy muy culposa y me cuesta mucho dejar las relaciones. Cuando terminé con Maxi, fui a terapia. Zaira, mi hermana, me prestó a su psicóloga de toda la vida porque necesitaba a alguien de confianza”, explicó.
Profundizando en sus experiencias, Wanda Nara admitió que la separación de Maxi López fue particularmente dolorosa. “No me gustó la mala relación que tuvimos con Maxi. No sé terminar, no sé cómo manejar los finales. Tal vez busco patrones similares en mis relaciones porque no estaba curada”, reflexionó. La conductora también reveló que su diagnóstico de leucemia la impulsó a tomar decisiones importantes, incluyendo el fin de su relación con Mauro Icardi. “No quise perder un día más de mi vida viviendo la de otra persona, por más que sea el padre de mis hijos”, sentenció.
Las declaraciones de Wanda Nara han generado un gran revuelo en los medios y redes sociales, desatando un sinfín de comentarios y análisis sobre sus relaciones pasadas. La sinceridad y vulnerabilidad con la que la empresaria abordó temas tan personales la han acercado aún más a su público, consolidando su imagen como una figura auténtica y sin filtros.
La historia de Wanda Nara sirve como un recordatorio de la complejidad de las relaciones amorosas y la importancia de priorizar el bienestar personal. Su valentía al compartir sus experiencias personales inspira a otros a reflexionar sobre sus propios vínculos y a tomar decisiones que les permitan vivir una vida plena y auténtica.